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Gente comprando en un supermercado Europa Press

Macroeconomía

BBVA Research recorta sus previsiones y avisa: el PIB crecerá un 1% en 2023 y habrá una recesión "moderada"

El servicio de estudios del BBVA cree que los bancos centrales mantendrán las subidas de tipos en los próximos meses. 

24 octubre, 2022 10:57

Nuevo jarro de agua fría para los Presupuestos de Nadia Calviño y María Jesús Montero. El BBVA Research se suma a los organismos que han revisado a la baja sus previsiones de cara al año que viene. En concreto, el organismo estima que el crecimiento en 2023 alcanzará el 1%, lo que supone una reducción de ocho décimas respecto a su último análisis. 

El servicio de estudios del BBVA estima también que este 2022 el PIB crecerá un 4,4%, lo que supone un aumento de tres décimas. Eso sí, avisa de que la actividad económica en el tercer trimestre se está ralentizando y que es muy probable que asistamos a un "estancamiento o a caídas moderadas" de la economía en los próximos trimestres. ¿El motivo? "Un aumento de la incertidumbre, de las expectativas de inflación y de los tipos de interés"

Para la institución el dato más significativo en este momento es la evolución de la actividad económica en nuestro país. El consumo con tarjeta viene ralentizándose en los últimos meses, al igual que los datos de afiliación media a la Seguridad Social. Todo ello viene motivado, en buena medida, por el aumento de los tipos de interés por parte del Banco Central Europeo (BCE). 

[El FMI recorta al 1,2% el avance del PIB en 2023 y rebaja casi a la mitad las previsiones del Gobierno]

El crecimiento del consumo privado se revisa también a la baja. En 2022 crecerá nueve décimas menos de lo previsto hasta el 1%; mientras que en 2023 el aumento será del 0,9% lo que supone una caída de 1,5 puntos respecto a la anterior previsión de la entidad. Así se recoge en el informe Situación Consumo' del segundo semestre del año. 

Sea como sea lo que parecen tener claro en el BBVA Research es que la recesión será moderada y la economía comenzará a mejorar en los primeros meses de 2023. Los motivos por los que la recesión será corta son varios: el primero, que los hogares están mejor preparados que en la crisis de 2008 para afrontar el encarecimiento de la financiación.

El segundo, que los tipos estaban en niveles históricamente bajos y, además, buena parte de los créditos negociados tienen tipos fijos. Además, el empleo -por ahora- aguanta bien con unos salarios aumentando. Eso hará que la renta disponible aumente también. 

Por último, el ahorro acumulado durante el período de confinamiento continúa siendo elevado. En concreto, estima que hay una bolsa de unos 130.000 millones de euros de dinero ahorrado que podría utilizarse para pagar deudas llegado el caso. 

Pese a todos estos factores, la entidad también considera indispensable la firma de un "pacto de rentas" que permita afrontar el futuro con cierta tranquilidad. Si no se formaliza, explica, "es probable que la conflictividad laboral aumente durante los próximos meses, lo que dañaría la creación de empleo y el crecimiento económico". 

Fondos Europeos

¿Y qué pasa con el efecto de los fondos europeos? Desde BBVA Research consideran que el ritmo de ejecución está siendo más lento de lo previsto, aunque cree que si aumenta la velocidad, en 2026 su aplicación podría aportar al PIB cerca de cinco de puntos. 

Dura advertencia la que envía también al Gobierno en términos de gasto. Reconoce que el déficit "se comporta mejor de lo previsto" gracias a que la recaudación por imposición directa se ha comportado mejor de lo previsto y a que la inflación ha ayudado a recaudar más. 

Ahora bien, alerta de que "algunos de estos determinantes podrían ser temporales y el desequilibrio estructural primario estaría alrededor del 1% del PIB, mientras que el gasto en intereses añadiría 2,5 puntos porcentuales al déficit estructural". 

Todo esto en un contexto en el que el BBVA Research considera que los Bancos Centrales van a continuar subiendo los tipos de interés. En el caso del Banco Central Europeo (BCE) cree que los llevará hasta el 2,75% forzado, en buena medida, por la Reserva Federal que podría elevar tipos hasta el 4,75% el año que viene. 

Los bancos centrales

Una política de contracción económica con el objetivo de reducir la evolución de la inflación que, si bien se va moderando, va a seguir "siendo elevada" el año que viene por la evolución de los precios energéticos y la incertidumbre que incorpora la Guerra de Ucrania. 

De hecho, ya estima que la economía de Estados Unidos tendrá una leve recesión en la segunda mitad del año que viene, mientras que la Eurozona se verá afectada por la caída del crecimiento económico a principios del próximo curso. Eso sí, en ambos casos serán leves gracias a la fortaleza de los balances de hogares y bancos. 

Especial atención merece al BBVA Reserach la situación de los balances energéticos, en duda por la guerra de Ucrania. El escenario base con el que trabaja es el de unos precios elevados (cercanos a los elevados) sin escasez de gas. 

Además, las medidas adoptadas por los países de la Unión Europea para buscar alternativas al suministro ruso, aumentar las existencias y las medidas de ahorro compensarían la menor oferta en 2023 y 2024. Eso si las importaciones de Rusia "mantienen los niveles actuales y las temperaturas se mantienen cerca de los promedios históricos".