Cani Fernández, presidenta de la CNMC, durante su intervención ante la Comisión de Asuntos Económicos del Congreso, antes de asumir el cargo.

Cani Fernández, presidenta de la CNMC, durante su intervención ante la Comisión de Asuntos Económicos del Congreso, antes de asumir el cargo.

Macroeconomía

La Covid abre la mano de la CNMC con las fusiones: del 'no' de Marín Quemada al 'son necesarias' de Cani Fernández

La actual situación económica ha llevado al regulador a admitir una posibilidad que rechazaba frontalmente hace un año.

16 septiembre, 2020 02:33

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La CNMC está cambiando, o quizás se está adaptando a los nuevos tiempos. Con la fusión de Caixabank y Bankia -que dará lugar al mayor banco por activos en España- a punto de cerrarse, la actual presidenta, Cani Fernández, ha dejado caer que el regulador tendrá una postura menos ortodoxa que la aplicada durante siete años por su antecesor, José María Marín Quemada. 

En una reciente intervención, Fernández advirtió de un aumento de las concentraciones empresariales en España por la pandemia, aunque garantizó que su organismo velará por la existencia de la competencia y los derechos de los consumidores.

"Somos conscientes de que en la situación postcovid de crisis, las consolidaciones van a ser necesarias, pero, por supuesto, vamos a garantizar que la competencia siga existiendo y los consumidores no se vean afectados", manifestó.

Una flexibilización que contrasta con la postura del "sheriff" Marín Quemada, que en innumerables ocasiones señaló públicamente que no veía con buenos ojos la integración de sectores claves como el bancario, el energético o el de telecomunicaciones.

Para Quemada siempre era necesario un actor más en cada sector y, de hecho, combatió férreamente posiciones de control como la de los canales de televisión Atresmedia y Mediaset. La multa de 77 millones a estas cadenas así lo atestiguó. Un pleito en el que, por cierto, la actual presidenta Cani Fernández defendió la postura de Mediaset como asesora. 

Nueva presidenta

Muchas cosas han cambiado desde la llegada a la CNMC de su nueva presidenta. La Covid ha empujado al mercado español a una avalancha de fusiones y adquisiciones para asegurar la supervivencia de las grandes empresas. Un proceso alentado desde Bruselas, desde el Gobierno español y al que ha debido adaptarse a contrarreloj el superregulador español.

Cani Fernández asumió su cargo el pasado 19 de junio en sustitución de José María Marín Quemada. Y lo hizo en medio de polémica por sus vinculaciones como experta en Competencia, pleiteando en múltiples ocasiones contra el organismo que ahora preside.

Pese a ello, en su discurso ante la Comisión de Economía de las Cortes, donde se aprobó su idoneidad para el cargo, aseguró que su objetivo sería velar por los pilares básicos de la libre competencia y garantizar, preservar y promover el correcto funcionamiento, la transparencia y la existencia de una competencia efectiva en todos los mercados y sectores productivos, en beneficio de los consumidores y usuarios.

Sin embargo, la Covid lo ha cambiado todo. La economía caerá un 9% este año según el Ejecutivo -un 13% según Funcas- y la facturación de las empresas se ha hundido. En Moncloa saben que la situación es compleja y alientan fusiones en privado. De hecho, han bendecido desde el Ministerio de Asuntos Económicos de Nadia Calviño las negociaciones entre Caixabank y Bankia para construir el primer banco español por activos.

Desde la CNMC indican a este diario que es pronto para hacer valoraciones al respecto y que el Consejo del organismo se pronunciará cuando proceda. Estamos ante la primera prueba de fuego para Cani Fernández y el nuevo consejo, pero todo parece indicar que no serán excesivamente puntillosos en las condiciones que se pondrán a la operación.

Banco Central Europeo

El acuerdo está impulsado por Moncloa y las fuentes consultadas indican que en la CNMC serán probablemente mucho más laxos que en la época de Marín Quemada. Ya sea por la Covid, por las presiones europeas o por la realidad del mercado, lo cierto es que no se esperan grandes trabas a la fusión.

La semana pasada el vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE) recordó de la necesidad de fusiones en el sector aunque no quiso referirse a la operación en concreto. “Una de las principales vulnerabilidades que hemos señalado en el pasado y, más concretamente, después de la pandemia, es la baja rentabilidad de los bancos europeos y las bajas valoraciones bursátiles que esta baja rentabilidad está provocando”. Como posible solución a este problema, el vicepresidente del instituto emisor aseguró que la consolidación “es uno de los instrumentos”.

En cualquier caso, todas las fuentes consultadas consideran que estamos ante un cambio de tendencia que se verá confirmado en futuras integraciones. Indican que desde el propio Ejecutivo se están alentando consolidaciones en sectores estratégicos que podrían dar sus primeros frutos durante el año 2021.

Energía y 'telecos'

En este punto, empresas energéticas que quieren reconvertirse en eléctricas más sostenibles, tienen un impulso que no habían tenido antes de la pandemia y podrán explorar integraciones sabiendo que la nueva CNMV no es la de Marín Quemada, que abortaba con sus declaraciones cualquier operación.

En el caso de las operadoras de telecomunicaciones, la situación es similar. El anterior presidente siempre defendió la irrupción de MásMóvil como quinto operador y su influencia en la reducción de los precios a los consumidores. En el nuevo escenario, la compañía presidida por Meinrad Spenger está siendo comprada por los fondos de inversión KKR, Cinven y Providence y aspira a ser protagonista en eventuales fusiones. 

Una consolidación que en el sector se ve como inminente y ante la cual la actual postura de la CNMC beneficiará que se produzcan. Un nuevo escenario, una nueva visión del regulador. Todo está abierto.