En la AIReF admiten que las actividades "más intensivas en conocimiento y tecnología", como las ramas científicas o las TIC, están empleando a más mano de obra altamente cualificado. Eso dentro un mercado laboral que "sigue mostrando un comportamiento positivo".

Sin embargo, esta evolución del mercado de trabajo y de algunos sectores en particular está, para la AIReF, en una fase incipiente. "Algo que todos estamos tratando de determinar es si el buen comportamiento del empleo está poniendo de manifiesto algún cambio estructural en el mercado de trabajo", comentó Herrero.

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En cualquier caso, la AIReF no duda de que una parte del nuevo empleo se concentre en ramas científicas y tecnológicas, pero no encuentra en esto una base suficiente para argumentar que el mercado laboral español haya cambiado. Por tanto, la institución se muestra escéptica a la hora de pronosticar un "potencial crecimiento de la economía" ligado a un "cambio estructural en el mercado de trabajo". 

Esther Gordo, directora de la División de Análisis Económico de la AIReF, comparó la situación española con la del resto de economías europeas para contextualizar los datos. "El patrón es similar. En nuestro caso, ha crecido mucho más, pero en términos relativos la composición es similar", explicó la presidenta de la AIReF.

Además, la AIReF encuentra otro motivo para dudar. Ese comportamiento positivo se está dando "más en términos de personas que de horas", es decir, se está contratando a más trabajadores, pero no se está traduciendo en horas trabajadas.

En relación con lo anterior, el informe de la AIReF presentado este jueves advierte de un "estancamiento de la productividad", con un nivel algo inferior al registrado en 2015", agrega el texto. Con todos estos datos, la conclusión de Herrero fue clara: "El tema de si esto representa un cambio estructural lo tenemos que dejar para más adelante". 

Previsiones

La tasa de paro española se sitúa en el 11,76%, según los últimos datos de la Encuesta de Población Activa (EPA), correspondientes al primer trimestre de 2024. A lo largo de este ejercicio apenas se moverá unas décimas a la baja, hasta el 11,6%, según las previsiones de la AIReF.

Más gente trabajando se traduce en menos personas en paro. Estas perspectivas en la reducción del desempleo llevan a la institución de Cristina Herrero a pronosticar "un menor crecimiento del gasto en prestaciones por desempleo".

La tendencia para los próximos años también se encaminará hacia un descenso de la tasa de paro. Así, en 2025, se situará en el 11,1%.

En 2026, la tasa de desempleo en España bajará de la barrera del 11% y quedará en el 10,8%, el mismo porcentaje en el que se mantendrá en 2027. Ya en 2028, la tasa de paro estará en el 10,7%