La vacunación avanza, y con ella la reactivación económica. Con todo, de manera paralela, también está evolucionando una paulatina reducción de la cantidad media destinada a cada prestación pública de desempleo. Según revelan los datos del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), desde marzo esta media ha caído un 112%, una reducción que ha sido constante en todos los meses hasta julio, últimos mes del que hay datos. 

Si en febrero la prestación media estaba en los 1.186,14 euros, en julio (último mes del que hay registro) bajó a los 1.049,93. Es decir, que en cinco meses ha perdido más de 136 euros. El peor mes fue junio, cuando la reducción mensual fue del 6,3%. 

¿Cuál es la causa de esta importante reducción de las cantidades? ¿Acaso una pérdida de ayudas o una retirada de subsidios? Nada más lejos de la realidad. Según indican fuentes del Ministerio de Trabajo y Economía Social, la clave está en la paulatina reactivación de trabajadores en ERTE con bases reguladoras mayores. 

Es decir, que los trabajadores que han ido reactivando las empresas estos meses con la recuperación de actividad son los que tienen sueldos más elevados y, por tanto, bases reguladora más altas. Desde el Ministerio apuntan que este es el fenómeno que explica este cambio durante los últimos meses. 

Lo que ya no confirman desde el departamento que dirige Yolanda Díaz es si los trabajadores que quedan en ERTE son, por tanto, los más precarizados o con salarios más bajos. Pero esta suposición no sería incorrecta, según fuentes del ámbito laboral consultadas por EL ESPAÑOL-Invertia.

Mejoras

Cabe recordar que, según las últimas informaciones ofrecidas por José Luis Escrivá, ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, quedan 246.000 personas en ERTE de las que 77.000 están en esta situación de forma parcial.  

A pesar de todo y de esta reducción mensual, la prestación media de desempleo revela una importante mejora respecto a años pasados. Respecto a agosto del año pasado, ha crecido un 3,5%. Y en el mismo mes de 2020 la prestación media ya había crecido un 19%. 

La recuperación de actividad está permitiendo al Gobierno reducir los recursos que tiene que dedicar a las prestaciones y el desempleo. Si durante 2020 se observaron incrementos constantes en las partidas mensuales destinadas a subsidios por encima del 219%, en 2021 las reducciones están siendo de hasta el 57%. 

En julio, último mes del que el SEPE dispone de datos, el gasto total en prestaciones contributivas pasó de 3.237 millones de euros a 2.027 millones, un 37% menos. 

Esto se debe a la reducción que se ha producido en paralelo de los perceptores o beneficiarios de las prestaciones del SEPE, que en julio se quedaron en los 1,9 millones de personas, un 39% menos.