Cabe recordar que el real decreto 901/2020, que aprobó el Gobierno de la mano de los ministerios de Trabajo e Igualdad el año pasado, pone orden en los planes de igualdad e impone las características legales y normativas que deben respetar. También cómo se deben negociar y acordar entre empresa y trabajadores, algo que ha generado ciertas tensiones entre patronal y sindicatos.

Con todo, el ‘aviso’ de que las empresas tienen que pactar y registrar los planes de igualdad data de 2019, que es cuando se aprobó el Real Decreto-Ley 6/2019 de Medidas Urgentes para Garantía de la Igualdad en el Empleo. 

Si alguna de las empresas ya lo ha hecho pero su plan no está adecuado a las características aprobadas en 2020, tiene hasta enero de 2022 para hacerlo.

De hecho, la mayoría de los planes de igualdad ya estaban presentados antes de la entrada en vigor del citado real decreto. Concretamente, se habían registrado unos 2.597 planes. Curiosamente, solo se han registrado 72 tras el RDL que recibió luz verde en 2020.

900 en trámite 

Por otro lado, hay casi 900 planes de igualdad presentados por las empresas, pero que se encuentran en trámite. Desde Trabajo admiten que puede haber más planes, pero que se hayan registrado dentro de convenios o acuerdos colectivos. 

Según precisa el RDL 6/2019, los planes de igualdad contendrán "un conjunto ordenado de medidas evaluables dirigidas a remover los obstáculos que impiden o dificultan la igualdad efectiva de mujeres y hombres. Con carácter previo se elaborará un diagnóstico negociado, en su caso, con la representación legal de las personas trabajadoras", que debe abordar, entre otras cuestiones, el proceso de selección y contratación, las condiciones de trabajo (incluida la auditoría salarial entre mujeres y hombres) y las retribuciones.