El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, en el Congreso.

El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, en el Congreso. Europa Press.

Economía

España exprime la 'hucha' de la UE para desastres agrícolas por clima adverso: lidera las ayudas tras recibir 150M en dos años

Nuestro país es el Estado que más recibe por fenómenos meteorológicos extremos desde 2023. Planas pedirá más recursos por los incendios.

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La ola de incendios que causó cuantiosos daños en la mitad occidental del país este agosto llevará de nuevo al Gobierno a llamar a la puerta de la UE en busca de fondos extraordinarios para responder a las necesidades de los agricultores y ganaderos afectados.

Lo ha anunciado este miércoles el ministro de Agricultura, Luis Planas: solicitará recursos de la reserva agrícola de la PAC, una 'hucha' de emergencia dotada con 450 millones anuales que, pese a nacer como instrumento de último recurso, empieza a ser habitual para España, el Estado miembro que más la exprime por golpes climáticos.

Por este motivo ha recibido casi 150 millones de euros desde 2023, más que ningún otro país. Responder a graves daños causados por clima adverso es uno de los dos problemas por los que entra en acción esta herramienta, la otra es asistir a los productores del sector primario ante graves perturbaciones de mercado.

De hecho, este objetivo y no una preocupación por el clima fue lo que justificó su creación en 2013. Desde ahí, la tranquilidad: tan extraordinario era el recurso al fondo de reserva de la PAC que no se estrenó hasta 2022, cuando la invasión rusa de Ucrania provocó un encarecimiento de materias primas que disparó los costes de producción en todo el continente. O sea, grave perturbación de mercado.

Bruselas desplegó entonces 500 millones de euros, de los que 64,6 millones acabaron en España, el segundo país que más ayudas recibió. Una posición coherente con el peso de la agricultura y ganadería de nuestro país dentro de la UE: somos el segundo benefactor de la PAC, solo superados por Francia.

El conflicto siguió obligando a echar mano de la reserva en 2023, aunque en una cuantía mucho menor. Se sacaron de la 'hucha' unos 156 millones para productores de cereales y oleaginosas de Polonia, Bulgaria, Hungría, Rumanía y Eslovaquia, países afectados por las importaciones ucranianas.

No obstante, aquel año otro revés golpeó de forma generalizada a los 27: la sequía. La magnitud del daño hizo que, como novedad absoluta, el fondo de reserva entrase en juego por primera vez para responder a un fenómeno meteorológico. Ahí comenzó el liderazgo de España.

De una emergencia europea por sequía...

Para atender la alarmante falta de agua, la UE 'sacó' de la hucha de emergencias de la PAC otro montante de magnitud: hasta 330 millones de euros que en 2023 se desplegaron para 22 países.

España fue el Estado que más recibió: 81 millones, el 24,5% del total. El siguiente país beneficiado fue Polonia, con 68,8 millones de euros y el tercero, Italia, con 60 millones. Era una muestra del daño que los campos europeos estaban soportando.

Un tractor para arar la tierra en el campo de Belchite, en Mediana de Aragón.

Un tractor para arar la tierra en el campo de Belchite, en Mediana de Aragón. Europa Press

Pero después las acciones han sido más localizadas y los importes, menores. La siguiente vez que ha actuado la reserva ha sido a principios de este año, una vez más por fenómenos climáticos adversos y catástrofes naturales excepcionales.

Se han entregado 99 millones de euros y España, otra vez, ha sido el Estado que más ha recibido: 62 millones de euros. En esta ocasión, sin embargo, seguida de lejos por Hungría, país para el que se aprobaron 16,2 millones de euros.

...a Dana e incendios

¿Por qué este liderazgo de España? Si en 2023 se compartía con otros 21 países el problema de la sequía, en esta última ocasión la pedida de auxilio en Bruselas fue por una tragedia puramente nacional: la Dana.

Las lluvias, además de acabar con la vida de más de 200 personas y convertirse en la peor catástrofe que haya afectado a la Comunidad Valenciana en lo que va de siglo, afectaron de lleno a la producción de frutas y hortalizas, vino, aceituna y ganadería.

Mientras, Croacia, Hungría y Chipre acudieron al fondo extraordinario por sequía y Letonia por frío récord en invierno, heladas y fuertes lluvias.

La situación abre varios debates con respecto al futuro de este fondo, cada vez de recurso menos extraordinario.

La más acuciante es si los 450 millones anuales con los que está dotado para el periodo 2023-2027 empiezan a quedarse cortos o si lo que hay que cambiar es el planteamiento de los propios Estados: ¿es realmente necesario recurrir a fondos de último recurso si el cambio climático es una evidencia, una realidad?

Porque, tal y como se señala en la información sobre el último desembolso: "debido a la creciente frecuencia de fenómenos climáticos adversos, la Comisión ha hecho hincapié en la necesidad de reforzar los instrumentos de gestión de riesgos", además de mejorar "la resiliencia de las explotaciones a medio plazo".

Seis meses después de este recado, España volverá a llamar a la puerta de la reserva por los incendios tras una intensa polémica por la prevención y los medios disponibles y con estas cuestiones aún en el aire.

Es más madera para el debate justo mientras se debate, además, el presupuesto de la próxima PAC del periodo 2028-2034, que podrían sufrir un recorte de más del 20%.