La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, en la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros.

La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, en la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros. Europa Press

Economía

Montero insta a las CCAA a usar el ahorro de la quita de deuda en gasto social y castiga a las regiones que bajen el IRPF

La ministra de Hacienda reconoce que la medida se hace a iniciativa de ERC, pero asegura que las más beneficiadas van a ser las autonomías del PP.

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La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, pretende obligar a las CCAA a utilizar el ahorro que lograrán con la quita de deuda prevista en gasto social. Todo debe ir a sanidad, educación, dependencia y servicios sociales que contempla el Estado de bienestar. 

Ese destino finalista del dinero se complementará con una variable en la fórmula de cálculo que castigará a las regiones que hayan bajado impuestos (sobre todo el IRPF) y estén sobrefinanciadas, como ocurre en el caso de Madrid o algunas autonomías del PP.

De esta forma, acotará el uso de los entre 6.600 y 6.800 millones de ahorro en intereses que supone el traspaso de 83.252 millones de deuda autonómica al Estado.

El Consejo de Ministros de este martes aprobó la primera versión del anteproyecto de ley de medidas excepcionales de sostenibilidad financiera para las comunidades autónomas de régimen común, que supone una rebaja media del 19% en la deuda de cada autonomía.

La ministra se ensañó en rebatir supuestos bulos sobre agravios comparativos con la medida, sobre todo el que asegura que se hace para beneficiar a Cataluña y no al resto de CCAA. No obstante, reconoció que es una medida que se hace tras la iniciativa de los independentistas catalanes de ERC tras su pacto de Gobierno con el PSOE.

A pesar de todas las dificultades que supone iniciar ahora el proceso parlamentario de aprobación y las negociaciones bilaterales, Montero se mostró convencida de que "al final, todos acabarán firmando".

"Confío en la institucionalidad de los presidentes autonómicos, ya que no puedo confiar en las políticas que expresan", señaló Montero para explicar su convencimiento en que las CCAA del PP entrarán en el proceso.

Andalucía y Cataluña serán las dos regiones más beneficiadas de la quita de la deuda, ya que el Estado asumiría 18.791 millones de euros en el caso de la primera y 17.104 millones en el caso de la segunda, acaparando más del 43% del total entre las dos.

Aún así, Montero quiso dejar claro que también sale muy beneficiada Valencia, con la mayor quita por ciudadano (2.284 euros) y Canarias, que reduce su deuda en un 50%. Para convencer al PP y argumentar las bondades de la medida, la ministra aseguró que siete de cada diez euros de quita de deuda van para sus CCAA.

En el caso valenciano, Montero criticó con dureza que Mazón vaya a rechazar una medida tan beneficiosa para sus ciudadanos, que le permitiría salir a financiarse en los mercados, cosa que ahora no puede hacer por su elevada deuda.

El anteproyecto no impone plazos por ahora para llegar a acuerdos con cada una de las CCAA, sobre todo porque primer hay que iniciar un periodo de enmiendas en el Congreso y sacarlo adelante, sin una mayoría de votos garantizada todavía.

Pero la ministra sí apremió a que cada territorio se pronuncie y "se apunte" cuanto antes a la negociación porque son 83.000 millones más que va a pasar a gestionar el Tesoro y que condicionan la situación de déficit y deuda del Estado, aunque no la incrementen.

Es significativo el caso de Madrid, que es la comunidad que no ha tenido que acudir al Fondo de Liquidez Autonómico (FLA) y cuenta con ingresos sobrantes para financiarse. Montero empezó su intervención tras el consejo garantizando que va a tener su quita, como todas las demás.

No obstante, aclaró que en este caso se tratará de recortar deuda que la comunidad de Díaz Ayuso tiene con la banca comercial (no con el Estado), lo que puede ampliar el plazo. "Tenemos que saber cuánto y cómo", apremió la ministra.

Difícil de calcular

María Jesús Montero reconoció que va a ser muy difícil calcular en cada caso concreto los ajustes a realizar sobre el montante básico de la quita, en virtud de si han bajado o no impuestos como el IRPF.

La idea es penalizar a quienes hayan aprovechado el flujo de recursos del Estado para bajar impuestos, como Madrid y algunas autonomías del PP en casos como el IRPF, además de Sucesiones, Donaciones o Patrimonio.

La ministra admitió la complicación de incluir esa variable en la metodología, sin atentar contra la autonomía financiera que la Constitución reconoce a las CCAA para retocar la parte cedida de los impuestos del Estado (50% del IRPF).

Desde Hacienda lo fían todo a las negociaciones bilaterales que se pretenden abrir. Ahí será donde se fije la mejora para las regiones que se considere que han sido "históricamente" perjudicadas con el modelo de financiación, y el castigo para quienes han hecho bajadas de impuestos excesivas.

Frente al rechazo total del PP y sus barones autonómicos a la medida, la ministra se preguntó "quién va a decir que no a que le condonen parte de su deuda, sin coste alguno". "¿Qué familia española en su sano juicio diría que no a aliviar la carga de su deuda?", insistió.