Los últimos datos del Banco de España y el Instituto Nacional de Estadística (INE) revelan un cambio sustancial en el comportamiento de las familias españolas: se deshacen de su deuda y dedican más presupuesto al ahorro. Todo pese a que el pasado año todavía estuvo marcado por el alza de los precios y el encarecimiento de las hipotecas por la subida de los tipos de interés.

La deuda de los hogares se redujo en diciembre del pasado año hasta los 685.400 millones de euros. Se trata del dato más bajo desde 2006, pero el crecimiento de la economía desde entonces es lo que permite que, calculado sobre el PIB, las hipotecas y demás préstamos de las familias estén en mínimos de este siglo.

Al tiempo, la riqueza financiera neta de las familias terminó el año en 2,09 billones de euros, tras crecer un 9,3% respecto a 2022. Por su parte, sus activos financieros netos supusieron el 142,8% del PIB, mientras que el saldo total de estos activos (dinero en efectivo, acciones, depósitos y valores en renta) escaló hasta los 2,83 billones de euros, un 6% más que un año antes.

Y es que el ahorro es otra de las variables que mejora en la economía de las familias españolas. La tasa de ahorro sobre la renta disponible cerró el pasado ejercicio con una media del 11,7%, aunque los datos del último trimestre muestran un repunte por encima del 13%.

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La cifra se sitúa cerca de las tasas de la Unión Europea (UE) y la zona euro -que han fluctuado todo el siglo entre el 11% y el 14%- y por encima de los niveles de España años atrás. En 2018, la tasa de ahorro de los hogares españoles era del 6%.

El saneamiento de los hogares coincide con el desapalancamiento de las empresas españolas. Así, la deuda de las sociedades no financieras se redujo a 946.600 millones de euros a cierre de 2023. En términos de PIB, la ratio de la deuda se situó en el 64,7%, el dato más bajo desde septiembre de 2006.

En su conjunto, la deuda de empresas y hogares se situó en 1,63 billones de euros, esto es, el 111,6% del PIB. No se observaba un porcentaje tan bajo desde marzo de 2002.

Tipos de interés y crisis

"El desendeudamiento se ha producido por varios motivos, uno de los cuales han sido los tipos de interés al alza y elevados de estos últimos años", explica en una conversación con EL ESPAÑOL-Invertia el analista financiero Guillermo Briones. "Cada vez que subían los tipos, se encarecían las hipotecas, por lo que las familias tienen un gran incentivo en quitarse las deudas para que no les terminen ahogando", añade.

De acuerdo con Briones, en épocas de crisis como la del covid-19, las familias optan por contraer el gasto y aumentar el ahorro. Esto se aplica también a las épocas posteriores a dichas crisis, de ahí que los hogares hayan seguido ahorrando incluso en un año de crecimiento económico.

"En esta ocasión, y después también de la anterior crisis financiera, de la que no nos hemos olvidado todavía, el ahorro no se ha materializado en acumulación de depósitos, sino a través del desapalancamiento", resume.