La vicepresidenta económica, Nadia Calviño.

La vicepresidenta económica, Nadia Calviño. EUROPA PRESS

Economía

Ómicron será menos letal para la economía española que otras olas, pero el FMI advierte que arriesga la recuperación

La nueva variante amenaza con dejar cortas las rebajas de estimación de crecimiento sobre España, aunque el INE dará una sorpresa positiva.

23 diciembre, 2021 05:30

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A la espera de que este viernes el INE revise al alza sus datos sobre la evolución del PIB en 2021 -como avanzó ayer la vicepresidenta, Nadia Calviño,- la economía española está despidiendo el año sometida a una cascada de revisiones a la baja por parte de los principales organismos nacionales e internacionales.

Lo preocupante es que en todos esos informes se reconoce que la evolución de ómicron amenaza con dejar cortas esas rebajas recién publicadas, aunque después de 22 meses aprendiendo a convivir con la Covid-19, el FMI estima que el impacto en la economía española de esta gran ola de contagios será limitado, según explicó este miércoles la responsable de la Misión para España, Dora Iakova, en una rueda de prensa.

"Ómicron introduce un riesgo a la baja que afecta en especial a las previsiones del año que viene. Pero hay que decir que, en el lado positivo, después de casi dos años conviviendo con el virus, la sociedad se ha adaptado, han aparecido nuevas formas de trabajo y la evolución de los contagios se ha desconectado de la actividad económica, así que confiamos en que ómicron tendrá menos efectos en la economía que las olas previas y su efecto en el PIB no será tan importante", confió Iakova en alusión a su repercusión sobre España.

La institución con sede en Washington revisó a la baja en más de un punto este viernes su previsión de crecimiento para este país. Sus últimas estimaciones, situaron el crecimiento de 2021 en el 4,6% y el de 2022 en el 5,8%.

La noticia no supuso una sorpresa para el Gobierno, dado que Nadia Calviño, ya había avanzado que en los próximos días habría revisiones al crecimiento económico del país en distintas direcciones. Se interpretó, ya entonces, que la noticia positiva podría venir del INE porque se daba por descontado la rebaja en las estimaciones del resto de organismos.

De hecho, el Banco de España hizo lo propio el pasado viernes con una rebaja en su previsión de PIB para 2021 y 2022 que no tiene precedente en la historia del organismo en un contexto sin un shock externo que pudiera explicar la magnitud del baile de las cifras.

Los economistas de la institución prevén un crecimiento para este año del 4,5% y del 5,4% para 2022. El recorte de 2021 alcanza el 1,9%. Pero no tiene en consideración las nuevas restricciones que algunas comunidades autónomas han adoptado para Navidad, ni tampoco la caída del consumo que -de forma preventiva y voluntaria- harán muchos consumidores que han cancelado eventos en estas fechas tan señaladas.

En su Boletín Económico, el BdE advertía de que el escenario central de actividad económica de sus proyecciones estaba sometido a "ciertos riesgos a la baja". En primer lugar, "las incertidumbres incluyen la posibilidad de que se produzca un nuevo agravamiento de la situación epidemiológica, del cual se están produciendo ya algunas señales en el tramo final del año. Las consecuencias de la aparición reciente de la variante ómicron son, en estos momentos enormemente inciertas". 

Dudas sobre la vacuna

También en su informe de previsiones, el FMI alude a esa misma preocupación. "La evolución de la pandemia sigue siendo uno de los principales riesgos. La actual ola de infecciones pone de manifiesto los riesgos que la pandemia sigue suponiendo para la actividad, sobre todo si las vacunas resultan ser menos eficaces ante las nuevas variantes", advertían los economistas de Washington en referencia a España.

Pese a que los ciudadanos ya se están acostumbrando a desarrollar su actividad diaria en un nuevo mundo de mascarillas y restricciones, todavía tienen miedo al devenir sanitario y económico. Esto hace que las previsiones de organismos, como BBVA Research, sobre lo que ocurrirá con el consumo en 2022 no sean excesivamente optimistas.

Según este servicio de estudios, la recuperación del gasto de los hogares no volverá a niveles precrisis el próximo año, aunque crecerá alrededor de un 4,5% frente al de este año. Esta estimación tampoco contempla un empeoramiento de la situación epidemiológica significativo.

La buena noticia de ómicron es que, con todas las cautelas pertinentes, todo apunta a que es menos letal que otras variantes, pese a que su velocidad de contagio es mucho mayor. El hecho de que la Covid-19 pueda pasarse como un catarro serio por la población sería una buena noticia tanto para la sociedad como para la economía.

Sin embargo, esa rapidez con la que se propaga es una amenaza al colapso hospitalario, puesto que, además, pacientes con esta variante también acaban en la UCI y hay fallecidos diarios. La incidencia acumulada ha aumentado de forma estrepitosa en los últimos días en los que se han llegado a notificar cifras récord, cuando parecía que la pandemia ya estaba controlada en los países con alto índice de vacunación, como es el caso de España.

Esto hace que tanto el FMI como el resto de los economistas, sean muy cautos a la hora de hablar del impacto de las nuevas variantes sobre la recuperación. Pero también confían en que los cambios -muchos estructurales- que se han producido en los últimos dos años de manera acelerada en los hábitos de los consumidores y las empresas hayan convertido a la economía en más resistente ante los brotes que seguirán produciéndose de esta pandemia.