El Instituto de Crédito Oficial (ICO) ya ha lanzado al mercado de pagarés su particular salvavidas frente al coronavirus. A la espera de que en los próximos días se concrete el programa marco mediante el cual podrá avalar hasta un 70% de estas emisiones de deuda, la institución ya ha adquirido papeles corporativos por 210 millones de euros repartidos en un total de 12 programas.

Los números de estos primeros movimientos los ha aportado el presidente del ICO, José Carlos García de Quevedo, en su intervención en el Foro Medcap 2020 que este miércoles celebraba su segunda sesión virtual. Esta inversión se corresponde apenas con los 20 días que cuentan desde que se publicó la orden ministerial de Economía que daba a la institución la facultad de poder participar en estas emisiones por hasta un 50% de sus volúmenes en el mercado primario.

En el marco del evento organizado por BME, que es también la sociedad rectora del Mercado Alternativo de Renta Fija (MARF) donde cotizan estos pagarés, García de Quevedo ha asegurado que los programas en los que ha participado hasta ahora el ICO han movilizado 450 millones de euros para la financiación de pymes. Esto supone que el organismo se ha hecho cargo de un 47% de las emisiones protagonizadas por compañías como la renovable Audax, a cuyo programa se ha referido específicamente.

El objetivo de estos movimientos, ha asegurado, es "apoyar a que otros inversores nacionales e internacionales acudan a estas emisiones", con el fin último de facilitar vías de financiación alternativas para las pymes españolas. En este sentido, en un panel virtual bajo el título 'Los mercados y las OPV, piezas claves del nuevo crecimiento', el presidente del ICO ha subrayado la importancia de la colaboración público-privada para salir de la crisis provocada por la pandemia del Covid-19.

Estrategia: predicar con el ejemplo

En esta misma línea, ha avanzado que en los próximos días se procederá a la firma del contrato marco para poner en marcha el plan de avales de hasta el 70% de la emisión para programas de pagarés registrados en el MARF hasta un valor acumulado máximo de 4.000 millones de euros. En este acuerdo participan BME, el ICO y el Tesoro Público y García de Quevedo ha adelantado que espera que pueda estar disponible para su aplicación "a partir de junio".

Aunque las solicitudes han podido registrarse ya en los últimos días, está establecido por la norma aprobada en el Consejo de Ministros que tanto BME como el ICO "deberán suscribir un contrato marco con cada una de las empresas no financieras que quieran beneficiarse del aval para sus emisiones de pagarés y con las entidades colocadoras que participen en el programa".

De la mano del capital riesgo

Por último, el presidente del ICO ha anunciado que la organización está trabajando con distintas empresas de inversión en capital riesgo y su patronal Ascri para establecer un programa de inversión específico enfocado a que la desinversión de estas últimas pueda realizarse mediante una colocación en el mercado de valores, ya sea el Continuo o el MAB.

En este sentido, el mercado de salidas a bolsa está seco en extremo desde el año pasado más allá de algún debut puntual en el MAB y las socimis, que tienen obligación normativa de sacar sus acciones a negociación en algún mercado regulado.