Lisboa, 29 nov (EFECOM).- Portugal creció un 0,3% en el tercer trimestre, por debajo del 0,6% que registró durante la primera mitad del año, aunque se mantuvo en un 1,9% por ciento en relación con el mismo periodo del pasado ejercicio, según los datos publicados hoy por el Instituto Nacional de Estadística.

Las cifras del INE del producto interior bruto (PIB) confirman que la economía portuguesa se enfrió entre julio y septiembre frente al trimestre anterior, cuando creció un 0,6%.

Aunque el consumo privado -que subió un 2,3% en el último año- animó el crecimiento, el impacto de la caída de la demanda exterior, -0,6% con relación al segundo trimestre- y de la inversión fue determinante en la desaceleración.

Las exportaciones se redujeron un 0,8% -seis décimas por encima de las caídas del 0,2% que se venían contabilizando desde principios de año-, mientras que las importaciones aumentaron un 0,7% con relación al segundo trimestre.

Los analistas locales atribuyen las cifras al impacto de la incertidumbre económica mundial, y en especial a la situación que se vive en países como España, Alemania o Reino Unido, algunos de los principales destinos europeos de las exportaciones portuguesas.