Daniel Salazar Castellanos

Bogotá, 26 sep (EFECOM).- Empresas con menos de dos década de vida, dirigidas por jóvenes emprendedores e impulsadas por la conectividad digital surgen con fuerza en países como Argentina, Brasil, Colombia, Chile o México como prueba del dinamismo de un sector que se afianza y que espera sustituir la actual inversión extranjera por capital latinoamericano en ese tipo de firmas.

"La mayoría de las tecnolatinas son empresas jóvenes (el 69 % tienen menos de 10 años) y están dirigidas por jóvenes emprendedores. Los éxitos iniciales, más la aceleración de la capacidad tecnológica en la era digital, combinada con el talento científico no explotado de la región, indica que estamos al comienzo de la era de las tecnolatinas", dijo a Efe el gerente del Sector de Integración y Comercio del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Fabrizio Opertti.

Incubadoras, aceleradoras de negocios, "ángeles" o padrinos inversores, entre otros actores del ecosistema están contribuyendo a que en varios países latinoamericanos surja una nueva generación de emprendimientos de alto impacto.

El portal de estadísticas alemán Statista calcula que en 2018 la inversión de capital riesgo en nuevas empresas latinoamericanas ascendió a casi 1.980 millones de dólares, frente a los 1.140 millones del año anterior.

La mayoría de las empresas emergentes e innovadoras latinoamericanas "tienen hoy en día capital extranjero. Esto se debe en parte a que los ecosistemas de inversión en este tipo de compañías están más desarrollados en Estados Unidos o Asia", señaló a Efe el directivo de la compañía argentina de comercio electrónico MercadoLibre Jaime Ramírez.

Agregó que "esto no quiere decir que en un futuro no muy lejano no podamos llegar a tener en la región (empresas) 'unicornios' con capital 100 % latinoamericano", para lo que se requerirá seguir "desarrollando la red de inversionistas para este tipo de proyectos".

La aparición de empresas emergentes e innovadoras que se hacen con una importante cuota de mercado y tienen un crecimiento rápido, es un fenómeno que en la región latinoamericana se ha consolidado con el nacimiento de poderosas empresas emergentes como la minorista en línea brasileña B2W, la chilena Crystal Lagoons, y las argentinas Despegar o MercadoLibre, entre otras, que nacieron como emprendimientos y hoy son empresas valoradas en más de 1.000 millones de dólares.

Las llamadas empresas emergentes o "unicornios" han de tener una valoración superior a los mil millones de dólares para entrar en ese concepto, que incluye a gigantes como Uber, Snapchat o Pinterest, en el mundo, y en Latinoamérica destacan las anteriores y las argentinas Globant y OLX, las mexicanas Kio Networks y Softtek, y las brasileñas Totvs y Nubank, y la colombiana de comercio electrónico Rappi.

"Durante 2018 se generaron en Latinoamérica ocho nuevos unicornios. La potencialidad de mercado de este tipo de empresas está en plena expansión", declaró a Efe el director del Grupo Entorno Económico de la Universidad Ean en Colombia, Fabio Fernando Moscoso, a la vez que subrayó que los países de la región ahora "tienen claro y priorizan la transformación digital de sus economías con el objeto de mejorar la producción, consumo, educación y salud".

En el informe "Tecnolatinas: América Latina en el tsunami de la tecnología" (2017) se identificaron más de 5.000 empresas privadas de base tecnológica nacidas en la región y que en su mayoría son emprendimientos digitales con alcance internacional. También se identificaron 123 tecnolatinas con una valoración superior a los 25 millones de dólares y con un valor colectivo por encima de los 37.700 millones de dólares.

B2W, el gigante del comercio electrónico fundado en Brasil en 2006, tiene "las marcas más grandes y queridas en internet (Americanas.com, Submarino, Shoptime y Sou Barato) y una operación de mercado de rápido crecimiento", resumió a Efe el director de Tecnología de la firma, Jean Lessa.

"Este modelo de negocio ha aumentado los desafíos de logística y operación, que se intensifican por el tamaño continental de Brasil. Para superarlos, la compañía comenzó en 2012 un proceso de adquisición e internalización de la cadena logística, ganando autonomía, optimizando el enrutamiento de entregas a clientes finales y ofreciendo los mejores niveles de servicio en el mercado", indicó.

Fundada en Argentina en 1999, MercadoLibre es considerado uno de los casos empresariales más exitosos de Latinoamérica y hoy "uno de los pilares más importantes" de su ADN sigue siendo "el emprendimiento", reconoció Ramírez.

"Hemos vivido en los últimos años un acelerado proceso de evolución, en el que la digitalización ha sido la gran protagonista, y eso se ve en todas las industrias. Esto, sumado a la concepción de que la tecnología ofrece soluciones confiables y facilitan la vida, ha repercutido en el incremento en el uso de estos recursos", apuntó.

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