Bilbao, 1 may (EFECOM).- Miles de vascos han salido este Primero de Mayo a la calle para demandar mejores condiciones de vida y la recuperación de derechos perdidos, así como para denunciar la precariedad en el mercado laboral.

Bilbao ha sido escenario de las principales manifestaciones de los sindicatos, que han afrontado la conmemoración de nuevo divididos.

En la Gran Vía de la ciudad se han dado cita de forma separada simpatizantes de ELA bajo el lema "Bizitza da lehena (La vida es lo primero). Nuestras vidas frente al capital", así como de CCOO y UGT, éstos en una manifestación unitaria. Por su parte, LAB ha celebrado su acto central en Pamplona.

En su primer Día Internacional de los Trabajadores como secretario general de ELA, Mitxel Lakuntza ha tenido duras críticas para el Gobierno Vasco, al que ha acusado de "permitir el saqueo permanente de las rentas de trabajo por parte del capital", y para el PNV, al que ha reprochado las "cenizas" que deja su política industrial.

Lakuntza ha replicado al presidente del PNV, Andoni Ortuzar, que en el último Aberri Eguna (Día de la Patria Vasca) consideró la estrategia del sindicato un "desastre" para Euskadi, que si no quiere huelgas que "dignifique las condiciones de trabajo" que dependen de las instituciones en las que gobierna.

"Nos acusaba -ha indicado el dirigente de ELA- de llevar a Euskadi a las cenizas", cuando "puestos a hablar de cenizas, más le valdría a Ortuzar explicar qué es lo que han hecho en Euskaltel", tras convertirse la británica Zegona en el primer accionista de la empresa vasca, y "cómo se vende una parte del país a los fondos buitre. Eso sí es llevar al país a las cenizas", ha dicho.

Por su parte, los sindicatos CCOO y UGT han reclamado en las manifestaciones que han celebrado en las capitales vascas que el nuevo gobierno que salga de las elecciones generales del pasado domingo "ponga la agenda social en primer lugar".

En la manifestación celebrada en Bilbao, la secretaria general de CCOO de Euskadi, Loli García, ha reivindicado políticas que pongan a la ciudadanía "en el centro del debate político".

La sindicalista ha pedido que en la nueva legislatura "se aborden los problemas que afectan al conjunto de la clase trabajadora" y ha reclamado la derogación de las reformas laborales de 2010 y 2012.

Asimismo, el secretario general de UGT de Euskadi, Raúl Arza, ha demandado al nuevo gobierno que prime la "agenda social" y haga una política "con más derechos".

El dirigente sindical ha apostado por recuperar "los derechos arrebatados durante la crisis" y ha exigido a la patronal que suba los salarios.