México, 27 feb (EFECOM).- Petróleos Mexicanos (Pemex) perdió el pasado año 7.551 millones de dólares, un 47,1 % menos que en 2017, cuando perdió 14.270 millones, según informó este miércoles la compañía.

Al presentar su informe financiero, la petrolera atribuyó los resultados a una mejora de las ventas totales y a una ligera disminución del coste de ventas a pesar del declive de la producción.

La compañía estatal señaló que sus ingresos ascendieron a 85.345 millones de dólares, un 20,2 % más que en 2017

Dentro de las ventas totales sobresale el aumento de ingresos nacionales del 11,8 %, hasta situarse en 49.818 millones de dólares, y del 35,8 % en las exportaciones, hasta ubicarse en 35.085 millones.

Según el informe, la producción de crudo fue de 1,83 millones de barriles diarios, un 5,9 % menor a la de 2017, y la de gas natural se redujo en un 4,4 % al situarse en 4.847 millones de pies cúbicos diarios (MMpcd).

El beneficio bruto se ubicó en 26.780 millones de dólares después de deducir el coste de ventas -que disminuyó un 0,3 % en tasa anual-, un 118,4 % más que el año precedente.

El rendimiento de operación aumentó un 267,6 %, al situarse en 19.560 millones.

La petrolera precisó que el rendimiento antes de impuestos y derechos (ebitda) aumentó un 480,4 % respecto a 2017, y se situó en 15.370 millones de dólares.

La deuda financiera total de Pemex ascendió a 105.792 millones de dólares, un 2,2 % más que a finales de 2017, de la que un 90,7 % es de largo plazo.

En el cuarto trimestre del año pasado, la compañía redujo sus pérdidas hasta los 6.378 millones de dólares, lo que supuso una disminución de 58,1 % frente a las pérdidas del mismo periodo de 2017.

Las ventas en el periodo octubre-diciembre sumaron 20.684 millones de dólares, 2,3 % por arriba del monto reportado en el mismo periodo de 2017.

A raíz de la reforma energética impulsada por el mandatario Enrique Peña Nieto (2012-2018), que abrió el sector al capital privado después casi ocho décadas de monopolio estatal, Pemex estuvo inmersa en un proceso de transformación que incluyó una reestructuración interna y la alianza con firmas privadas.

La empresa pública anunció en 2016 un recorte presupuestario de 100.000 millones de pesos (unos 5.400 millones de euros), afectando especialmente a sus proyectos de exploración y producción.

No obstante, con el nuevo gobierno de Andrés Manuel López Obrador, Pemex vive una nueva etapa con la promesa del mandatario de resucitar la estatal y aumentar la producción.