La Comisión Europea (CE) dio este martes luz verde al grupo energético alemán RWE para adquirir el negocio de producción de electricidad renovable y nuclear de la también alemana E.ON, tras concluir que la operación no distorsionará la competencia.

Según Bruselas, RWE seguirá haciendo frente a una "competencia real" tras la operación, tanto en los mercados de producción como en el suministro de electricidad.

Por ello, el Ejecutivo comunitario ha autorizado la adquisición sin condiciones, precisa un comunicado.

La empresa RWE, con sede en Alemania, está presente en toda la cadena de abastecimiento de electricidad.

Una vez que concluya el intercambio de activos con E.ON, RWE estará presente sobre todo en los sectores de producción de electricidad y aprovisionamiento.

E.ON es una empresa energética que opera en el mismo sector y que, tras la concentración, centrará sus operaciones en la distribución y la venta minorista de electricidad y gas.

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