Pedro Sánchez ha logrado encandilar a los inversores internacionales. El fuerte rechazo que generó su inesperado ascenso a La Moncloa se ha traducido en una prudente confianza conforme han avanzado los meses y la enmienda a las reformas de su antecesor en el cargo no ha sido tan drástica como se las prometía y se esperaba.

Los mismos inversores a los que la moción de censura a Mariano Rajoy pilló desprevenidos parecen constatar ahora que el relevo no ha sido tan dramático como se pintaba. Si justo después del ascenso de Sánchez un 3% neto de los inversores internacionales aconsejaban infraponderar la inversión en España, ahora un 17% neto se decanta por sobreponderar, lo que según la Encuesta de Gestores de Bank of America – Merrill Lynch se traduce en la segunda mejor marca de toda Europa.

Estos son los datos que arroja la última edición del conocido sondeo, que preguntó a las manos fuertes del mercado justo cuando Sánchez ya había anunciado que presentaría Presupuestos Generales del Estado para 2019 y, aunque introduciría medidas polémicas pero muy acotadas como la ‘tasa Tobin’, cumpliría con las exigencias de Bruselas en cuanto a déficit. Por el camino, el líder socialista ha renunciado a derogar la reforma laboral en contra de lo que tantas veces había prometido y a sacar la ‘regla de oro’ de estabilidad presupuestaria de la Constitución, entre otros supuestos.

La mejora de percepción hacia la economía española es la más abultada de entre sus vecinos, que a consecuencia de las señales de debilidad de algunos indicadores macro han empeorado su valoración en la mayoría de casos

La mejoría de 20 puntos porcentuales netos que se ha apuntado la economía española en cuanto a destino de inversiones solo la supera Italia, pero su punto de partida era mucho peor al de España. Y lo mismo ha ocurrido con la meta alcanzada al comienzo de este 2019. Mientras que en los últimos siete meses Sánchez se ha esforzado en acreditar su compromiso con la Unión Europea y las instituciones comunitarias, las luchas intestinas de los dos partidos euroescépticos que gobiernan el país mediterráneo en coalición han tenido el efecto contrario.

Los informes de los últimos meses de un batallón de firmas de inversión global han apuntado muy especialmente hacia la terquedad de sus líderes políticos la hora de asumir las obligaciones de estabilidad presupuestaria exigidas por la Comisión Europea. Después de largas semanas de declaraciones cruzadas y pulsos, Roma ha cedido y el 35% neto de consejos de infraponderar que sufría en enero y que solo se había suavizado muy ligeramente desde entonces ha pasado a iniciar el año a cero gracias a esta docilidad tardía.

CHALECOS AMARILLOS, BREXIT Y DÉFICIT

Mientras tanto, la encuesta refleja que en los últimos siete meses Francia ha perdido 33 puntos en la tabla de preferencias. Esta caída es consecuencia de la mayor fragilidad de sus cifras macro y el auge de las protestas ciudadanas contra algunas medidas económicas y fiscales de Emmanuel Macron, especialmente de los violentos ‘chalecos amarillos’. Así, los inversores internacionales han pasado de una sobreponderación neta del 20% para el país vecino hasta un consejo de infraponderar del 13%.

Invertia11

A pesar de todo, la suavización del discurso de Sánchez y sus muchas fotos con líderes de los países europeos más fuertes no ha sido suficiente para devolver a España el esplendor perdido. Todavía está lejos de reconquistar sus cotas de popularidad previas al relevo en el Gobierno, cuando era la economía favorita en Europa con un 30% neto de consejos de sobreponderar.

Ahora, a falta de que el Congreso de los Diputados dé luz verde a los Presupuestos y se relajen tensiones con Cataluña, los inversores siguen dejándose aconsejar por la cautela. Se quedan a medio camino de aquella cota y prefieren apostar sobre seguro al señalar a Alemania como su destino de inversión preferido con un 19% neto de sobreponderación. Una marca que, sin embargo, está sensiblemente por debajo del 25% del pasado junio y más del 30% de popularidad que alcanzó este último diciembre.

A menos de 80 días para la teórica entrada en vigor del Brexit, Reino Unido marca récords como la economía europea más detestada por los gestores internacionales

No obstante, aunque esta misma semana la ministra de Economía, Nadia Calviño, haya asegurado en el Spain Investors Day ante cientos de inversores y analistas internacionales que esa era “la mejor oportunidad para alardear de las sólidas cifras” de la economía nacional, todo el mérito no es del Gobierno. En este sentido la agencia de riesgos crediticios Standard & Poor’s (S&P) acaba de anunciar la posibilidad de mejorar el rating ‘A-’ que ahora otorga al país. Y el Brexit también tiene su parte en el camino de regreso de los inversores.

Unas cifras de reciente publicación señalan que solo la Comunidad de Madrid logró atraer 300 millones de inversión desde Reino Unido en los nueve primeros meses del año pasado, sin que el cambio de Gobierno haya tenido un impacto significativo en la evolución de esta cifra. No es de extrañar que el sondeo del banco estadounidense sitúe a la economía británica como la más detestada del momento, con un 39% neto de consejos de infraponderar, cota que supone un empeoramiento de 22 puntos porcentuales frente a las cifras del pasado junio. Entonces, el camino de transición hacia el Brexit parecía mucho más despejado que ahora, cuando teóricamente quedan menos de 80 días para la desconexión entre Londres y sus socios continentales.