Peter Diamandis, fundador de la Fundación X Price y cofundador de Singularity University, y Steven Kotler, autor y emprendedor, propusieron en 2016 el modelo de las 6D de las organizaciones exponenciales, que describe el viaje que lleva a cabo una tecnología exponencial, según el cual, a medida que la tecnología impacta en los mercados, las barreras de entrada se disuelven y las líneas entre sectores e industrias se desdibujan.

El modelo plantea que las tecnologías exponenciales se caracterizan por estar digitalizadas, ser engañosas y disruptivas, y estar desmonetizadas, desmaterializas y democratizadas.

Sin embargo, existe una tecnología exponencial que destaca sobre las demás. Se trata de la inteligencia artificial. En 2017, el Instituto Global McKinsey, en su estudio Artificial Intelligence the Next Digital Frontier [Inteligencia artificial la próxima frontera digital], analizaba el estado actual de la inteligencia artificial, afirmando que, de momento, los grandes tecnológicos, como Amazon, Apple, Google y Facebook, son los que más están invirtiendo en el desarrollo de tecnologías relacionadas con la inteligencia artificial.

Sin embargo, la adopción comercial todavía es muy lenta. Un aspecto especialmente relevante del estudio es que los autores nos ofrecen datos sobre la inversión externa en empresas enfocadas en inteligencia artificial por categoría de tecnología. Las seis áreas por orden de importancia son: (1) el aprendizaje automático, (2) la visión computarizada, (3) el procesamiento del lenguaje natural, (4) los vehículos autónomos, (5) la robótica avanzada y (6) los asistentes virtuales.