La creatividad potenciará la inteligencia artificial (IA) hasta el infinito, porque ella ya se encarga, y mucho mejor que nosotros, de recopilar los datos, de relacionarlos, de realizar predicciones, de alertar, de prevenir y de asegurar. Pero del tipo de orden que reciba para ponerse en marcha, dependerá el grado de su eficacia.

"Sin duda será la creatividad humana la que incrementará el gran poder de la IA generativa en todos los sectores, y los hará brillar", afirmó Inma Martínez, protagonista de la ponencia inaugural del AI & Big Data Congress, organizado la semana pasada en Barcelona por CIDAI (Centre of Innovation for Data tech and Artificial Intelligence) y el centro tecnológico Eurecat.

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La reconocida experta internacional en tecnologías digitales e IA, presidenta y miembro de varios consejos asesores, entre ellos el Partenariado Global en IA -GPAI.AI, impulsado por el G7 y el G20- y la Secretaría de Estado para la Digitalización y la Inteligencia Artificial (SEDIA), está convencida que esta tecnología "está generando y generará como ninguna otra un gran progreso económico y social, ofreciendo ventajas competitivas para aquellos que la dirijan con creatividad". Sin embargo, advierte, "hemos de tener en cuenta que la IA necesita datos verificados para ser eficiente y tecnología blockchain para lograr integridad". 

Sin duda, como señaló Joan Mas director del CIDAI y del Área Digital de Eurecat, "la aparición de la IA generativa, popularizada por el famoso ChatGPT, ha situado esta tecnología en el centro del debate". Ahora es necesario, según él, integrar sus grandes potencialidades en aplicaciones de uso sencillo para los usuarios.

La viabilidad de los espacios de datos

Durante la jornada, se presentaron casos de uso reales propuestos por startups y scale-ups, que detallaron las ventajas de aplicar la IA generativa en los ámbitos de la industria química, la sostenibilidad corporativa, la atención médica, el mundo formativo y educativo, y la ciberseguridad, entre otros.

Expertos de Microsoft, NTT Data y SAP abordaron el impacto de esta nueva tecnología en empresas y negocios, destacando también las cuestiones éticas y normativas que aún deben concretarse. También, se debatió sobre la viabilidad de los espacios de datos, un concepto que está en desarrollo a nivel europeo y que persigue implantar las herramientas tecnológicas que permitan desplegar la economía basada en este elemento, en un contexto de soberanía europea.

En esta línea, el director de Desarrollo del Ecosistema de IA y Cloud de Huawei, Roi Rodríguez de Bernardo, incidió en el hecho que nos encontramos en un momento "en el que se necesitan pilotos para validar estos espacios", y dio a conocer el último desarrollo de la firma al respecto, el Boot-X, un prototipo de espacio de datos en la cadena de valor del sector de la automoción, replicable a otros sectores, sobre el que se están negociando acuerdos para realizar las primeras pruebas en Europa, concretamente en Alemania y España.

Adoptar "cuanto antes" la IA generativa

Asimismo, entró en debate la futura organización del trabajo con el uso generalizado de herramientas basadas en IA y automatización. Aunque haya transcurrido poco tiempo todavía desde que se implantó, ya se ha podido comprobar que esta tecnología está cambiando la forma en que las empresas trabajan. "La IA ha puesto de relieve el cambio de paradigma en la interacción persona máquina", aseguró Jens Hansen, director general en Europa Oriente Medio y África de Microsoft Data & IA, que destacó la importancia del talento experto en el entrenamiento de los modelos fundacionales de la tecnología.

Hubo acuerdo unánime entre todos los ponentes sobre la importancia de adoptar cuanto antes la IA generativa. Los valores que aporta en cuanto a optimización de la automatización, detección y predicción de procesos industriales, cadenas de suministros, recursos energéticos y seguridad, como ejes principales, determinan un claro antes y después en los sectores productivos y la organización del trabajo. Se trata ya de un presente tremendamente activo.