"La mejor manera de curar una enfermedad es anticiparse a ella". Así resume Marcos Ladreda qué es y a qué se dedica ETERNAdx (Startquake), la startup asturiana de la cual es CEO y cofundador y que quiere medir la velocidad a la que envejece nuestro cuerpo para, así, poder tomar las medidas adecuadas para vivir más tiempo pero, sobre todo, mejor.

Y es que, aunque la carga genética de nuestro ADN condiciona desde que nacemos cuál será el ritmo al que envejeceremos, su peso tan solo es del 30% del total de la ecuación, según afirma el cofundador de ETERNAdx: "Lo que sí podemos decir es que los hábitos de vida y los factores ambientales influyen en más del 50% en nuestro envejecimiento y, según los últimos estudios de la Organización Mundial de la Salud, el 60% de los factores relacionados con la salud individual y su calidad están correlacionados con el estilo de vida".  

Precisamente, para poder conocer nuestra edad biológica, el estado de deterioro de nuestro organismo y la velocidad a la que envejece y, con toda esa información, cambiar los hábitos de vida que tenemos e intentar así retrasar ese proceso nacía ETERNAdx que ya ultima el lanzamiento de un test que, con tan solo una gota de sangre y la potencia de la inteligencia artificial, permitirá que cualquiera pueda conocer su edad biológica, en apenas una semana y por no más de 300 euros.

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"Este test se puede realizar en casa con una gota de sangre del dedo y, una semana después de realizar el test, llega el resultado desde ETERNA LABS. Aún no hay un precio de venta fijado para el mismo pero rondará los 200-300 euros, lo que lo hace el test más accesible del mercado en cuanto a precio. Esperamos poder lanzarlo al mercado a finales de 2023", explica Ladreda.

Y es que, según nos explica el cofundador de ETERNAdx (Startquake), hoy en día el número de personas que alcanzan los 65 años de edad está aumentando en todo el mundo y, aunque este aumento de la longevidad es, sin duda, un logro importante para la salud humana, el envejecimiento sigue siendo el mayor factor de riesgo para el desarrollo de enfermedades crónicas. 

"La esperanza de vida ha aumentado globalmente y es más alta en países con mayor gasto en salud, sin embargo, si desglosamos la esperanza de vida en 'años vividos de manera sana' y 'años vividos con discapacidad/enfermedad' observamos que son los países con mayor gasto en salud donde más se vive con discapacidad o enfermedad", afirma Ladreda.

Modelar los hábitos de vida

Aunque las enfermedades crónicas están afectando principalmente al sector de mayor edad de la sociedad, Marcos Ladreda apunta a estudios recientes que demostrarían que el estilo de vida de los jóvenes puede influenciar y acelerar el proceso de envejecimiento y participar en el desarrollo de enfermedades multifactoriales. "La evidencia indica que la proporción de la vida que se disfruta en buena salud se ha mantenido prácticamente constante, lo que implica que los años adicionales están marcados por la mala salud", asegura.

Para intentar anticiparse a precisamente esa degeneración hacia la mala salud, surgía en 2021 ETERNAdx, una idea en la que, además del biólogo Marcos Ladreda, están involucrados Diego Mendoza, economista; y Antonio Pérez-Campoamor, ingeniero industrial.

La empresa ha sido cofinanciada en una ronda en fase pre-semilla por business angels como la abogada Ana Miralles (especializada en derecho societario y asesoramiento en órganos de administración) y el emprendedor Daniel Suárez (CEO de Zapiens) y, gracias a ello, además de ser considerada como una de las startups más innovadoras de nuestro país, el test de ETERNAdx será realidad en unos meses, una prueba con la que poder conocer la edad biológica y la velocidad del envejecimiento de cualquier persona.

"La edad biológica es un valor expresado en años indicativo del estado real del organismo. Dependiendo de la genética y el estilo de vida, este concepto puede verse alterado y aumentar por encima de la edad cronológica o viceversa. Las personas con menos años biológicos que cronológicos se correlacionan con estilos de vida saludables, de forma general, haciendo que el riesgo a sufrir enfermedades directamente relacionadas con el envejecimiento (cáncer, enfermedades cardiovasculares, Alzheimer, diabetes...) e incluso el riesgo de mortalidad disminuya", explica Ladreda.

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Hoy en día, existen varias formas de cuantificar este concepto, apunta, aunque la mayoría de ellas consiste en complejos y costosos tests de ADN como los de metilación o epigenéticos, inaccesibles para la mayoría de las personas, algo que Eternadx quiere cambiar.

"En ETERNAdx hemos inventado un sistema que provee de una medición idéntica a los relojes epigenéticos en un 99% pero es mucho más rápida, más barata y más sencilla que los anteriores", afirma. Algo en lo que la aplicación de herramientas de inteligencia artificial ha sido clave y ha permitido a la empresa tanto agilizar sus procesos como acelerar el desarrollo de sus tests. 

La idea además es que cualquier persona pueda medir el envejecimiento de su cuerpo de forma continua. “La idea es controlar el proceso de envejecimiento para prevenir el riesgo a desarrollar enfermedades crónicas y aplicar un enfoque preventivo a la gestión de la salud. El valor de este tipo de mediciones es que sirven como un indicador para modificar nuestros hábitos de vida en función de la aceleración del envejecimiento por eso recomendamos hacer un seguimiento mensual para poder optimizar nuestra salud”, aclara Marcos Ladreda.

Aliviar la saturación del sistema sanitario

¿Es posible saber cómo afectan diariamente las actividades que hacemos a lo largo del día, lo que comemos o por dónde nos movemos a nuestro envejecimiento? ¿Cuál es la relación directa entre nuestro estilo de vida y, por ejemplo, las enfermedades crónicas?

A muchas de estas preguntas también trata de dar respuesta ETERNAdx (Startquake). "Las personas que llegan a cumplir 100 años cuestan menos al sistema sanitario que las personas que fallecen entre los 75 y los 90. Hay una asociación entre la enfermedad crónica y el estilo de vida que muchas veces ignoramos. Sería idóneo tener un listado de las actividades que hacemos a lo largo de nuestro día y cuantificar cuánto afectan a nuestra salud. Así podríamos ganar años de vida sin enfermedad y con calidad. No solo a nivel de coste para un sistema sanitario ya saturado es importante este aspecto, sino para cada uno de nosotros, que podamos disfrutar de una vida feliz y una vejez con el mínimo sufrimiento".  

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Para ello, Ladreda defiende el valor de la medicina personalizada y preventiva: "Son muchos los años que estas enfermedades pasan en fase silente o subclínica y es precisamente en esta fase cuando debe hacerse el diagnóstico precoz y el abordaje preventivo. Nosotros pretendemos utilizar la edad biológica como un primer indicador de esta fase silente y del estado general de salud. Al final, con las tendencias demográficas actuales y la incidencia que las enfermedades crónicas tienen sobre la población de edad avanzada y el gasto que suponen aplicar un enfoque preventivo será lo que de viabilidad al sistema sanitario".

Un nuevo escenario en el que la tecnología es crucial y en el que desde Asturias quieren poner su grano de arena. "Esperamos contribuir a este cambio de paradigma con nuestra tecnología. Uno de los desafíos para tener un enfoque preventivo y personalizado a gran escala es la dificultad para cuantificar la salud en individuos que se consideran sanos y nosotros vamos a ayudar esto a través de medir la edad biológica de manera fiable y barata".

De nuevo, la tecnología y la ciencia se unen en pro de uno de los grandes desafíos de la humanidad: vivir no solo más sino y sobre todo con mejor calidad de vida.