El hito más importante, que, además, convierte a la región en referente nacional, es el inicio del despliegue del proyecto CIBERRREG.

Este programa, cabe recordar, va a estar coordinado desde Navarra e implica a otras siete comunidades autónomas. El objetivo, impulsar la ciberseguridad desde los territorios y con el foco puesto en la administración y las empresas.

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Incluido dentro del plan Retech, en el proyecto CIBERREG que coordinará Navarra participarán, además de la Comunidad Foral, Asturias, Cantabria, Castilla-La Mancha, Extremadura, Murcia, Islas Canarias e Islas Baleares.

Las cinco líneas de actuación sobre las que se articulará este proyecto son los centros de ciberseguridad regionales, el fomento del ecosistema empresarial en el sector de la ciberseguridad, los centros demostradores, la gestión del talento y una serie de acciones para la sensibilización en la materia.

El segundo hito se ha conocido hace tan sólo unos días y tiene que ver más con la práctica que con la teoría. Y es que el gobierno foral ha autorizado a la consejería de Universidad, Innovación y Transformación Digital, a través de la Dirección General de Telecomunicaciones y Digitalización, a desplegar un contrato de ampliación de los cortafuegos perimetrales del Ejecutivo Foral por un importe estimado de 1.454.719 euros para los años 2023-2027.

Es un blindaje en toda regla que protege todos los sistemas informáticos que contengan información crítica, muy valiosa para la administración.

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El objetivo de esta inversión, en esencia, es, según explican desde el departamento que dirige Juan Cruz Cigudosa, la de mantener y reforzar el actual sistema de seguridad perimetral del gobierno de Navarra.

De esta manera, durante los próximos cinco años, este contrato "permitirá la protección y gestión de la navegación de los más de 27.000 usuarios corporativos, salvaguardar todos los servicios que la Administración Foral tiene publicados en internet en más de 2.500 servidores y posibilitar el acceso a las plataformas de teletrabajo, tanto básico como avanzado, a más de 6.000 personas".

Los cortafuegos perimetrales, añaden desde la consejería, son la primera línea de defensa contra los ataques desde internet de una organización.

Se colocan generalmente en el punto donde la organización se conecta con internet y su objetivo principal es proteger la red interna de las amenazas externas, limitando el acceso no autorizado y bloqueando el tráfico malicioso.

Para ello, permiten definir reglas que determinan qué tráfico y qué aplicaciones son permitidas y cuáles no, e incluyen también características de inspección profunda del tráfico para detectar intrusiones y prevenir ataques.

Asegurados los sistemas críticos hasta 2027, el gobierno navarro puede centrarse ahora en desarrollar su estrategia. Y, como decíamos, esta estrategia tiene en el proyecto CIBERREG, el principal aliciente.

Navarra Cybersecurity Center

Hace unas semanas, se anunció uno de los primeros planes incluidos en este proyecto, el Navarra Cybersecurity Center.

El consejero de Universidad, Innovación y Transformación Digital, Juan Cruz Cigudosa, para hacerlo posible ha firmado un acuerdo con el Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE) y otras catorce comunidades para impulsar la ciberseguridad en España.

Es este acuerdo el que permitirá que la Comunidad Foral ponga en marcha un centro regional de ciberseguridad, que actuará como ventanilla única para responder a incidentes de seguridad digital tanto para ciudadanos como para empresas, prestando especial atención a pymes y autónomos.

Durante su intervención en una mesa redonda junto a otros representantes autonómicos, el consejero Cigudosa resaltó el papel de la Comunidad Foral en la coordinación y liderazgo de uno de estos cuatro proyectos, en concreto en materia de ciberseguridad.

De esta manera, el proyecto CIBERREG contribuirá a la transformación socioeconómica sostenible y al fortalecimiento del sector TIC, poniendo la ciberseguridad en el centro.

En el caso de Navarra, la propuesta específica se centra en la creación del centro regional de ciberseguridad, el cual coordinará y gestionará las líneas de actuación dentro de la convocatoria.

Así será el centro

Este centro prestará servicios fundamentales que permitirán, por un lado, realizar autodiagnósticos e itinerarios de mejora personalizados para una mejor protección de las empresas y, por otro, monitorizar el ciberespacio en busca de amenazas, lo que será beneficioso para la administración, las empresas y la ciudadanía en su conjunto.

Además, el proyecto contempla la creación de dos laboratorios centrados en la seguridad TIC, aplicable a cualquier empresa, y en la seguridad industrial, con especial énfasis en entornos urbanos, hospitalarios y cadenas de fabricación, entre otros.

De igual manera, se fomentará el ecosistema empresarial dentro del sector de la ciberseguridad mediante la creación de un catálogo de empresas de ciberseguridad que operan en Navarra y con ayudas económicas para incentivar la protección pymes y autónomos.

También se llevarán a cabo campañas específicas para sectores como el de menores de edad o el de personas mayores, con el objetivo de sensibilizar a todos los agentes que componen la sociedad sobre la importancia de la ciberseguridad.

Durante su intervención, Cigudosa ha puesto el foco, además, en la importancia de la formación en esta área y ha anunciado la implantación de un master de ciberseguridad en la Universidad Pública de Navarra (UPNA), así como diferentes ayudas destinadas al fomento de las matrículas en másteres e itinerarios específicos relacionados con la ciberseguridad.

De igual modo, el consejero ha resaltado la apuesta del gobierno de Navarra por una formación en materia digital de calidad, lo que "permitirá estar mejor preparados para la fuerte demanda de profesionales que este sector está ya experimentando".