Anunciada en mayo, hace unos días la Agencia Gallega de la Innovación (GAIN) compartió este proceso con el Consejo Asesor de I+D+i, un paso clave para que el cuerpo legislativo comience definitivamente a tomar forma e impulso.

El Consejo Asesor de I+D+i, órgano de participación y consulta de los agentes del sistema gallego en materias relacionadas con la investigación, la transferencia, la valorización y la innovación, se reunió recientemente para avanzar en la redacción de la futura ley. 

[Galicia inicia el trámite para su Ley de Innovación con el foco puesto en el talento y en desarrollar "soluciones reales"]

Además, en el encuentro también se trató la Estrategia de Especialización Inteligente (RIS3) de Galicia, que establece los retos y prioridades de la política de I+D+i para los próximos años. Ambos pilares -la ley y la RIS3- están condenados a entenderse.

La directora de la Agencia Gallega de Innovación, Patricia Argerey, informó al Consejo Asesor, formado por representantes del ecosistema gallego de I+D+i, sobre la oportunidad de contar con una nueva Ley de Innovación y Ciencia de Galicia. 

Argerey contextualizó esta nueva norma en la creciente relevancia de las políticas de I+D a nivel europeo y estatal y destacó que se centrará en las empresas y en cómo facilitar su innovación.

En cuanto a los retos a los que se enfrenta, destacó la necesidad de reforzar la participación de todos los agentes, especialmente de las pymes y la sociedad; impulsar grandes proyectos de tractores; avanzar en la adecuación de los instrumentos a las necesidades de cada sector; aumentar la capacidad de atraer y retener talento y mejorar la inversión a través de la colaboración público-privada y el aprovechamiento de oportunidades de colaboración entre regiones ya nivel internacional.

[Galicia: de la innovación en automoción o textil a los drones y la aeronáutica]

La norma, que actualmente se encuentra en fase de redacción del proyecto de ley en colaboración con los diferentes agentes implicados para su enriquecimiento y consolidación, persigue, entre otros objetivos, fomentar la innovación en las pymes y en el sector público.

También busca avanzar en la simplificación administrativa y abordar la brecha de género en I+D+i mediante medidas enfocadas a lograr la igualdad de oportunidades. Los siguientes pasos serán consolidar un borrador y presentarlo para audiencia pública y aportes antes de su aprobación.

Asimismo, la directora de la GAIN debatió con los representantes del ecosistema gallego de I+D+i la RIS3, el marco estratégico de la especialización territorial basada en el conocimiento y la innovación. 

Además de las novedades respecto a la estrategia precedente y los retos y prioridades definidos, ha destacado el nuevo instrumento de las misiones, que pretenden apoyar grandes proyectos transformadores que permitan que la I+D+i dé respuesta a los problemas de la sociedad y al mismo tiempo fortalecer la competitividad de la industria.

Para ello, se destinarán 30 millones de euros a través de dos convocatorias (en diciembre de 2023 y en 2025) para financiar un número reducido de misiones (entre 2 y 6) con el fin de actuar como palanca para la movilización de recursos público-privados. Argerey anunció que próximamente comenzarán las reuniones con los agentes para definir estas misiones.

Como puede comprobarse, la tramitación laboriosa de la Ley de Innovación y Ciencia no está reñida con que se produzcan avances reales, proyectos concretos, como es el caso de las citadas misiones, con una inversión ya comprometida, o como es el apoyo de la Xunta a proyectos concretos.

Fábrica inteligente y sostenible

En este último ámbito, se puede destacar que el programa Fábrica Inteligente y Sostenible, promovido desde la Xunta, ha financiado con 1,7 millones de euros -sobre un total de 2,7 millones- un proyecto que permite avanzar en la fabricación de materiales y tecnologías innovadoras para desarrollar baterías de iones de litio más eficientes energéticamente, económicas y sostenibles, con aplicaciones en áreas como los vehículos eléctricos. 

Se trata de la iniciativa Eco-smart Batt, auspiciada por un consorcio liderado por Ferroglobe y en el que también participan ABCR Laboratorios, Enso Innovation, Artabro Tech y el centro tecnológico Cetim.

Este proyecto contribuye, explican desde GAIN, a la mejora de la densidad energética, el coste y la sostenibilidad de las baterías de iones de litio a través de la investigación de nuevos materiales y tecnologías de seguimiento, control y simulación que permitan avanzar en nuevos procesos productivos más eficientes y rentables. 

La empresa Ferroglobe Innovation en colaboración con el centro tecnológico Cetim trabajará hasta 2025 también en esta línea de con el objetivo de obtener baterías de alta densidad energética, sostenibles y de larga duración a base de silicio para su uso en energía eléctrica y movilidad.

En cuanto al programa Fábrica Inteligente y Sostenible, la Xunta ha anunciado que ya se han convocado las bases para la quinta edición de este programa, dotado con 24 millones de euros, para apoyar proyectos de I+D+i estratégicos para el tejido industrial gallego y que se centren en el desarrollo de tecnologías digitales y verdes fundamentales para lograr un modelo productivo innovador.

La directora de la Agencia Gallega de Innovación destacó el impacto de esta línea de ayudas en el ecosistema gallego de innovación en la medida en que "permite apoyar proyectos transformadores de la industria y así impulsar la competitividad de la economía gallega a través del conocimiento".