El futuro que queremos no puede esperar y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de Naciones Unidas son la mejor hoja de ruta para alcanzarlo. También son una llamada a la acción para ciudadanos y organizaciones que asumen la responsabilidad que les corresponde en su consecución.

La actualidad nos desafía, pero el futuro nos ofrece todas las oportunidades de una sociedad construida sobre el aprendizaje. Una sociedad que aprende es una sociedad que se perfecciona, más inclusiva, sostenible y mejor.

Las instituciones educativas asumimos el reto que esto representa y trabajamos para desarrollar en nuestros alumnos el compromiso con la sociedad que están llamados a liderar.

Nieves Segovia, educadora y experta en innovación docente

1. Toma conciencia

El primer paso para desarrollar nuestro rol como agentes de cambio y nuestra propia responsabilidad es comprender la realidad y sus posibilidades, pero también la urgencia de sus amenazas. Sólo así conseguiremos una trasformación social.

2. Escucha

Para aprehender el contexto, escucha con atención, especialmente a los jóvenes que te rodean. Su mirada introduce nuevas referencias que enriquecen la visión con la que habitualmente nos aproximamos a los objetivos del milenio. Además, se trata del futuro que van a heredar.

3. Observa

Observa a tu alrededor y más lejos. Los objetivos que perseguimos son globales y se interpretan de forma diferente en cada región del mundo. Pensar globalmente y actuar localmente sigue siendo una máxima que debemos aplicar.

4. Aprende

Es necesario asumir que el aprendizaje se prolonga a lo largo de toda la vida y que esa mentalidad es la única vía para la construcción de un futuro posible para todos. Los cambios exponenciales que estamos viviendo exigen una actitud abierta a la transformación personal y al desarrollo de ideas y compromisos alineados con los desafíos del planeta.

5. Educa

Pero aprender no basta. Compartir nuestros conocimientos es la manera de contribuir a una sociedad que también educa y es una responsabilidad que no admite excepciones. En la nueva sociedad del aprendizaje todos somos profesores y todos somos alumnos.

6. Conecta

Para crear las condiciones de un cambio sostenible es necesario tejer redes de colaboración. Nuestras relaciones personales y profesionales pueden constituir también un ecosistema de transformación. Conecta con personas que comparten tu visión y con organizaciones que han hecho del logro de los ODS el eje de su actividad. Seguro que aprendes y desarrollas las vías para tu propia contribución.

7. Comparte

Comunica tus experiencias y tu voluntad de impacto en la sociedad. Hazlo en tu entorno personal y en tus redes sociales. Cada uno de nosotros es el mejor altavoz de la necesidad del cambio.

8. Actúa

Pasa a la acción. Con pequeñas decisiones contribuyes a un objetivo superior y ejemplificas la posibilidad del cambio. Consume de forma responsable, dándole prioridad a empresas comprometidas con el impacto en la sociedad y en el medioambiente. Las empresas B Corp son un magnífico ejemplo.

9. Cuídate

El cambio empieza en uno mismo. Sólo si cuidamos nuestro bienestar físico, mental y emocional podremos contribuir a la salud y felicidad del mundo. Los mismos principios que se aplican para el equilibrio personal, operan para el equilibrio del planeta.

10. Sonríe

Finalmente, mantener la esperanza y un espíritu positivo son esenciales para seguir trabajando con entusiasmo en favor de un futuro mejor.