Después de siete años de ausencia, este martes el Congreso de los Diputados ha vuelto a acoger un Debate sobre el estado de la Nación. En todo este tiempo ha habido un cambio de gobierno, múltiples bailes de ministros y una pandemia cuyas consecuencias económicas y sociales han centrado el foco de las intervenciones.

Desde 2015 también se ha producido un significativo cambio de agenda en lo que a la ratificación del compromiso de España con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) fijados por la ONU y la Agenda 2030 se refiere. De hecho, desde que el Ejecutivo se adscribió a los ODS, muchos de sus miembros empezaron a aparecer en público con la insignia que los caracteriza, tal y como ha hecho hoy Pedro Sánchez, convirtiéndose así en el primer presidente de nuestro país que abre un debate sobre el estado de la nación con el pin en la solapa.

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"Las empresas incorporan afortunadamente cada vez más a su gestión criterios de sostenibilidad. Hacen gala de su compromiso que se denomina ESG, siglas que responden en inglés, a las palabras de Medio Ambiente, Compromiso Social y Gobernanza. Pues bien, este es el momento de probar el compromiso social de las grandes empresas [...] Es el momento de demostrar que trabajan para crear valor para sus accionistas, y también crear valor a su sociedad. Así lo hicieron muchas durante la pandemia, y ahora, de nuevo, la sociedad, la mayoría social, necesita el compromiso social de las grandes empresas", ha recalcado el presidente.

La guerra y la pandemia de coronavirus han sido el hilo conductor de toda la intervención del líder del Ejecutivo, que ha durado una hora y veinte minutos, y en la que ha dejado declaraciones directamente relacionadas con los siguientes ODS:

Objetivo 3. Salud y bienestar

Respecto a este ODS, Sánchez ha recalcado el trabajo del Gobierno en el "fortalecimiento del estado de bienestar, y ha anunciado que "este mes de julio vamos a continuar reforzando el sistema nacional de salud, procediendo a la estabilización de casi 70.000 sanitarios [...] Vamos a reforzar la salud pública en nuestro país".

Objetivo 4. Educación de calidad

En su intervención inicial, el presidente también ha destacado la importancia de la educación pública en nuestro país. Ha anunciado un "impulso" al sistema educativo "con la incorporación del idioma de la programación informática y la robótica".

También se ha comprometido a la revisión y mejora del sistema de becas para que ningún estudiante se quede sin poder acceder a la educación superior por motivos estrictamente económicos.

Objetivo 7. Energía asequible y no contaminante

En el apartado energético, el líder del Ejecutivo ha declarado que su gobierno deberá "reforzar la apuesta firme por las renovables y el autoconsumo, y deberemos mejorar la eficiencia y el ahorro energético".

También se ha comprometido a "adoptar medidas de ahorro energético, incrementar el teletrabajo, fomentar el transporte público, bajar la temperatura de nuestra calefacción o subirla en el aire acondicionado. Nada que atente contra nuestro modo de vida, pero sí acciones que nos permitan defender nuestros valores cuando se ven atacados".

Objetivo 9. Industria, innovación e infraestructura

Siempre enmarcándolo en el contexto de la actual crisis energética derivada, dice, de la guerra en Ucrania, ha destacado que va a "continuar avanzando en la independencia energética, destinando 1.000 millones de euros para que la gente pueda adquirir placas solares, bombas de calor y vehículos eléctricos".

También ha dicho que "vamos a impulsar el ahorro y la eficiencia energética en la Administración Pública; vamos a fomentar el autoconsumo en edificios públicos, premiando el uso de este tipo de energía; y también estamos destinando 700 millones de euros para descarbonizar territorios como las islas Canarias y Baleares". Acerca de esto último, Sánchez ha remarcado que la alternativa a esa descarbonización será renovable, sin energía nuclear ni centrales térmicas.

El líder del Ejecutivo también ha hecho referencia a dos nuevos retos: la digitalización y la transición ecológica, de las que ha dicho "no son contrarias a la prosperidad económica, sino que son esenciales".

Por eso, ha asegurado el presidente, "hacemos de la transición ecológica no sólo un frente para mitigar las consecuencias del cambio climático en nuestro país, sino también porque es la mayor oportunidad de España para reindustrializarse y generar nuevos puestos de trabajo en territorios que hasta ahora no tenían esas oportunidades y hacer que España sea exportador de energía verde".

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"Sólo con la digitalización del tejido productivo se generan las ganancias de productividad necesarias para aumentar salarios, reducir las jornadas laborales y crear empleo de calidad", ha rematado.

Objetivo 10. Reducción de las desigualdades

El "escudo social" ha sido otro de los pilares que han sustentado toda la intervención. Sánchez ha anunciado un "paquete de ayudas para proteger a la clase media trabajadora y los colectivos más vulnerables de nuestro país", orientadas a contener la inflación.

Entre estas medidas, tal y como ya anunció el propio Ejecutivo, se encuentran la bonificación al carburante, las ayudas al alquiler, la reducción del IVA energético, el refuerzo del Ingreso Mínimo Vital, revalorizar las pensiones o el cheque de 200 euros para las familias más vulnerables.

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"Este gobierno no va a tolerar que haya empresas o individuos que se aprovechen de la crisis para amasar mayor riqueza a expensas de la mayoría". A propósito de esto último, Sánchez ha adelantado que su gobierno fijará un impuesto a los beneficios extraordinarios a las grandes empresas energéticas de nuestro país con el que se pretende recaudar hasta 2.000 millones de euros al año.

También ha pedido que cualquier beneficio extraordinario de las grandes empresas se reinvierta en los trabajadores y en los consumidores que están soportando el azote de la inflación. "La salida de la crisis, con solidaridad y justicia social, es más rápida".

Ha remarcado que en dos años se han recuperado los niveles de desigualdad previos a la pandemia, y ha achacado esa recuperación a las medidas sociales, mientras que, asegura, la fractura en el tejido social que dejó la crisis de 2008 tardó 11 años en empezar a cerrarse.

Objetivos 13 y 15: Acción por el clima y vida de ecosistemas terrestres

El presidente ha lamentado la devastación de los incendios forestales que prácticamente cada verano asolan partes de nuestro país, como el de la Sierra de la Culebra, en Zamora, que ha sido uno de los más destructivos de nuestra historia.

Sánchez ha vinculado las altas temperaturas y los fenómenos climáticos adversos con la emergencia climática, y ha prometido "más recursos para prevenir y luchar contra los incendios, con un nuevo marco regulador estatal básico que nos permita ser más eficaces en la lucha contra los incendios".

Objetivo 16. Paz, justicia e instituciones sólidas

Uno de los temas preeminentes en los medios de comunicación de todo el mundo durante los últimos meses está siendo la guerra de Ucrania tras la invasión rusa del país. Sánchez ha señalado a este conflicto, iniciado a finales de febrero de este año, como una de las consecuencias del aumento de la inflación en Occidente, así como de la crisis energética que vive el continente europeo".

"La guerra ha agravado el problema de la inflación en Occidente, debido a la importancia que tienen Rusia y Ucrania en el suministro mundial de gas, petróleo, cereal y grano", ha dicho.

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También relacionado con el objetivo 16, el presidente ha remarcado el papel que España jugó hace más de un año "con la ejemplar repatriación de afganas y afganos".

El presidente ha concluido: "España es un país pacifista, nuestra forma de convivir es pacífica, salimos a la calle contra cualquier violación de la legalidad internacional, y ese orden ya no responde a la lógica de la división, sino al choque entre quienes violan y respetan los derechos Humanos [...] Siempre vamos a contribuir a la resolución pacífica de los conflictos, siempre lo ha hecho España".