Los entornos sostenibles de bienestar se miden en cuanto a eficiencia de bienestar y no medioambiental, que es a lo que estamos acostumbrados en materia de sostenibilidad. “Hablamos de tres dimensiones: fisiológicas, como la calidad de aire, la luz natural o el descanso; cognitivas para mejorar la concentración mediante diseños de mobiliario o decoración, y sociales, para que nos relacionemos mejor, tanto con las personas como con la naturaleza” explica Anna Ferrer, arquitecto del estudio CU4 Arquitectura y Well AP. “Unas dimensiones vivas que se plantean desde el edificio y que han de mantenerse con la gestión”, añade.

En este punto, la certificadora Well, primera certificación centrada exclusivamente en la salud y el confort, ayuda con mediciones científicas en 10 categorías para que empresas y oficinas, que es donde pasamos casi el 90% del día, no olviden el bienestar de las personas. La arquitectura y el diseño es fundamental a la hora de crear espacios de bienestar.

“Mediciones de aire pueden detectar radón, primera casusa de cáncer de pulmón de no fumadores, o compuestos volátiles de mobiliario y limpieza que resultan una amenaza para nuestro organismo”, advierte Bieto Silva, responsable de la certificación Well, que colabora con el Instituto tecnológico de Galicia.

Imagen de unos sofás de Actiu Actiu Imagen cedida

“Tan importante es el objetivo como su implementación en todos los niveles” confiesa Bieto, “Al hacer inspecciones nos encontramos con trabajadores que no saben cómo funcionan esas súper sillas que se les ha colocado para que su espalda no sufra las 8 horas de asiento”. Por eso esta certificadora está viva y realiza seguimiento continuo.

Salario emocional y disfrute

Madrid Design Festival destaca los espacios de bienestar y la certificación well para acelerar la promoción de edificios y comunidades que ayuden a las personas a crecer sanos.

Desde Alicante, Actiu trabaja creando mobiliario para el bienestar en las sedes de las multinacionales. Desde Google hasta Intel. “Es medicina preventiva que ayuda a las personas. Si no nos hacemos exigentes la arquitectura o el diseño podría estar produciendo, por ejemplo, cáncer o suponiendo un detrimento del rendimiento de los trabajadores” afirma Soledat Berbgal, su consejera y directora de reputación.

Estas estrategias de salud y bienestar son el cambio que Madrid Design Festival pone de manifiesto con una mesa redonda en la que Jana Fernández, especialista en estrategias de bienestar físico, mental y emocional, destaca la importancia de que los edificios, viviendas, espacios de trabajo, residencias y colegios sirvan para que las personas realicemos nuestras necesidades fisiológicas.

"En el salario emocional el disfrute y la calidad de bienestar es capital"

Para ello es fundamental que promuevan el descanso, que tengamos luz natural para sintetizar la vitamina D, y por último disfrutar. “En el salario emocional el disfrute y la calidad de bienestar es capital. Tanto es así que invertir en oficinas de bienestar es además rentable” sostiene Soledat.

Además de salud es rentabilidad. Las personas que tienen mayor satisfacción pueden llevar a cabo mejor su trabajo. “People, Planet and Profit (triple botton) han de ir de la mano para que cualquier cambio sostenible pueda perdurar en el tiempo. Invertir en bienestar significa aumentar la productividad, mejorar la imagen de marca, retener talento y aumentar ventas” explica Pablo Muñoz, Cofundador y CEO Evalore que pone en valor que, en Estados Unidos, que va en cabeza en este tipo de oficinas, la rentabilidad de estos edificios incrementa un 15 o un 20% su valor.

Porque, al igual que el planeta no tiene un plan B, nosotros, las personas, tampoco, pero nuestra salud es clave en materia sostenible.