La sociedad de los cuidados, una meta impulsada y liderada por las administraciones locales

La sociedad de los cuidados, una meta impulsada y liderada por las administraciones locales

Historias

El 'Libro Blanco de Ciudades que Cuidan': hacia un nuevo paradigma de los cuidados

Esta propuesta, elaborada por la FEMP y Fundación Mémora, pretende contribuir al avance hacia una sociedad cuidadora que, lejos del individualismo, piense en el beneficio colectivo.

21 diciembre, 2021 01:47

Los Gobiernos locales, ciudades y municipios, como agentes más cercanos al ciudadano, son los principales impulsores de los cuidados y la atención a las personas vulnerables. Con el fin de proporcionarles una hoja de ruta de atención a los cuidados, la Federación Española de Municipios (FEMP) y la Fundación Mémora han trabajado conjuntamente para desarrollar el Libro Blanco de Ciudades que Cuidan.

El compendio elaborado durante la pandemia, entre marzo de 2020 y diciembre de 2021, recoge las reflexiones de más de 100 expertos. Estos, agrupados en 22 especialidades, reflejaron sus ideas y experiencia sobre los cuidados para orientar las políticas locales "hacia un nuevo paradigma en el que los cuidados ocupen un lugar central", señalan.

Tal como recoge en su introducción, el libro blanco pretende facilitar "una propuesta multidisciplinar para avanzar hacia una sociedad cuidadora que abandone el individualismo y piense en el beneficio colectivo”, insistiendo en que todas las personas "en un momento u otro de nuestras vidas, podemos ser dependientes y requerir cuidados".

Tres fases: reflexión, debate y puesta en común

Esta iniciativa, que pretende avanzar hacia un "nuevo modelo urbano" que ataje los retos del futuro consistió en tres fases. La primera está dedicada a la reflexión sobre las principales temáticas que se interrelacionan con los cuidados; desde la gestión del creciente problema de la soledad que sufren muchas personas mayores, hasta el feminismo. Pero también pasando por ámbitos como la salud, el envejecimiento o la ecología y el medio ambiente.

"En un momento u otro de nuestras vidas, podemos ser dependientes y requerir cuidados", señalan los expertos en este libro

La segunda fase fue un ejercicio de debate en mesa redonda donde se concretaron los puntos fundamentales de las reflexiones para facilitar su aplicabilidad. De esta manera, se querían ofrecer herramientas para que las ciudades puedan desarrollar maneras efectivas de implementar sus políticas locales de cuidados.

La I Conferencia de Ciudades que Cuidan cerró el ciclo trifásico con su celebración la semana pasada. Contó con la participación de personas de reconocido prestigio en el ámbito de los cuidados y la atención social, como Victoria Camps, filósofa y patrona de la Fundación Mémora, y otros expertos en los ámbitos del envejecimiento, la sanidad, el voluntariado y el feminismo.

La presidenta del Congreso, Meritxell Batet, participó en la I Conferencia de Ciudades que Cuidan

La presidenta del Congreso, Meritxell Batet, participó en la I Conferencia de Ciudades que Cuidan FEMP

En la presentación del acto también intervinieron delegados de las instituciones públicas nacionales, como Abel Caballero, presidente de la FEMP, Meritxell Batet, presidenta del Congreso de los Disputados o Ignacio Álvarez Peralta, secretario de Estado de Derechos Sociales.

Caballero insistió en que los nuevos cuidados deben ser mejores. "Tienen que reconocer derechos, y somos los Gobiernos Locales los que tenemos que llevarlos a cabo”, señaló.

Por su parte, Batet aprovechó la ocasión para subrayar la necesidad de proteger a las personas más vulnerables, cuya situación se ha agravado durante la pandemia. “Debemos recuperar el valor de cuidar”, destacó.

Hacia una sociedad cuidadora

La crisis de la pandemia ha agravado nuestra situación económica, teniendo consecuencias desastrosas en nuestro mercado laboral, aumentando la tasa de paro, sobre todo, en las mujeres. Por otro lado, también ha afectado al trabajo de cuidados hacia mayores y menores, que continúa siendo, en gran parte, no remunerado.

"Debemos recuperar el valor de cuidar", subrayó la presidenta del Congreso Meritxell Batet

El cierre -general y parcial- de clases y actividades extraescolares dirigidas a grupos sociales como el de las personas mayores, enfermos y dependientes o los menores no tutelados, ha aumentado su situación de vulnerabilidad. Un ejemplo ha sido la soledad no deseada, una epidemia silenciosa que ha afectado de manera muy negativa a las personas mayores durante la pandemia.

Frente a estos nuevos problemas, la acción de fundaciones, empresas y entidades sociales y la ciudadanía, junto con la de la Administración Pública ha resultado crucial. Y la iniciativa del Libro Blanco Ciudades que Cuidan, poniendo en valor su trabajo, propone adoptar un nuevo enfoque que ilumine el camino hacia una sociedad más cuidadora.