Con Susana Díaz sí, pero con Pedro Sánchez, no. El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, habló con la presidenta de la Junta de Andalucía en la mañana de este viernes para recibir la solidaridad de la socialista, uno de los principales referentes del PSOE.

Según fuentes conocedoras de la conversación, fue Díaz quien se interesó por el estado de Rajoy y lo llamó para conocer de primera mano su estado y mostrarle su apoyo.

Díaz mantiene unas relaciones correctas con Rajoy, si bien lo combate duramente en Andalucía y critica sus políticas para todo el país.

La conversación se produce a cuatro días de la cita con las urnas y sin que el presidente y el líder de la oposición hayan hablado desde el tenso debate que mantuvieron el lunes.

"Le mandé un mensaje, intenté localizarlo por el móvil, pero me fue imposible. Ayer lo hice públicamente. Lo he hecho vía mensaje de texto, vía SMS", dijo Sánchez en una entrevista en la Cadena Ser. "En democracia, la violencia no tiene hueco", añadió el candidato socialista. Fuentes de su equipo aseguraron a EL ESPAÑOL a primera hora de la tarde de este jueves que la conversación telefónica no ha tenido lugar. 

La relación de Sánchez con Rajoy dista mucho de la cordialidad que ambos han mostrado en sus reuniones de la Moncloa por Cataluña. Tras el debate del lunes, el presidente aseguró sentirse agraviado y el PP cargó contra el socialista por su "macarrismo político a la desesperada", en palabras de la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría. El martes, en los funerales por los muertos en Afganistán, ambos se saludaron fríamente y con visible disgusto. 

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