Imagen del acusado junto a su abogado durante el juicio. Foto: Europa Press.
Condenan a 28 años de cárcel al hombre que asesinó a su pareja en Piedrabuena tras años de maltrato
El varón le clavó un cuchillo jamonero de grandes dimensiones en el cuello durante la madrugada del 8 de enero de 2023.
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La Audiencia Provincial de Ciudad Real ha condenado a 28 años de cárcel a E.S.R., el hombre de 32 años declarado culpable de matar de una cuchillada en el cuello a su pareja sentimental, de 24 años, en la localidad ciudadrealeña de Piedrabuena en 2023.
La sentencia ha sido dictada por la presidenta Mónica Céspedes Cano tras el veredicto de un jurado popular y considera que el acusado actuó con alevosía, movido por celos, dominación y control, en un contexto de violencia machista continuada.
Además del asesinato, el condenado ha sido declarado culpable de maltrato habitual, dos delitos de maltrato de obra, coacciones leves y vejaciones injustas.
En concreto, ha sido condenado a 28 años, 1 mes y 15 días de prisión, además de diversas penas accesorias como la privación de la patria potestad sobre la hija común y libertad vigilada durante diez años tras el cumplimiento de la pena. También tendrá que indemnizar con 180.000 euros a su hija menor, 135.000 euros a los padres de la víctima y 40.000 euros a su hermana.
Sucesión de los hechos
Los hechos se remontan al menos al año 2020, cuando se producían insultos, agresiones físicas y el control del teléfono y las relaciones sociales de la víctima, así como un trato humillante que afectó gravemente a su salud psicológica.
Según la sentencia, fue en la madrugada del 8 de enero de 2023 cuando el condenado esperó a su pareja en el portal del domicilio familiar después de acosarla con decenas de mensajes y llamadas telefónicas durante la noche mientras ella cenaba con unas amigas.
Al llegar se produjo una fuerte discusión y le clavó un cuchillo jamonero de grandes dimensiones en el cuello, causándole una herida inciso-punzante que le seccionó la tráquea y le provocó la muerte en pocos minutos por una insuficiencia respiratoria aguda.
El tribunal ha considerado que la víctima no tuvo posibilidad alguna de defensa y que el ataque fue repentino, violento y ejecutado con intención de matar. Además, la conducta del acusado estuvo guiada por una voluntad clara de dominación y sometimiento y representa el desenlace de una escalada de violencia de género ejercida durante años.
