Tras un par de años en stand by, Amaia Montero vuelve a la carga. La exvocalista de La Oreja de Van Gogh ha sacado recientemente su nuevo disco en solitario, Nacidos para creer. En su momento, la portada del álbum dejó boquiabiertos a todos sus fans, pues la cantante lucía una espléndida figura.

Sin embargo, durante los Premios Cadena Dial, la cantante apareció sobre el escenario con un mono naranja de trabajo, como lo hace en el videoclip de su nuevo tema y un rostro bastante cambiado que llamó poderosamente la atención.

Amaia lucía una cara más hinchada de lo habitual. Sus pómulos estaban excesivamente marcados y sus ojos muy estirados. El debate continuó en las redes, donde los usuarios estuvieron debatiendo largo y tendido si se trataba de algún retoque estético o, por el contrario, era un efecto del maquillaje.