El Cabildo de la Catedral de Toledo ha querido abrir las puertas del templo a los grupos que deseen celebrar la Eucaristía o tener un tiempo de oración. Así, desde el próximo día 23 de julio y hasta el 11 de agosto más de cinco mil peregrinos de algunas diócesis españolas, así como de varios países de Europa y América, celebrarán diversos actos en el templo primado y podrán realizar la visita cultural.

En este sentido, durante esos días la Catedral Primada abrirá sus puertas a los grupos de peregrinos que lo han solicitado, desde las 19.00 hasta las 21.00 horas. Durante este tiempo, habiendo realizado la reserva con antelación, podrán celebrar la Eucaristía en un espacio que ha sido preparado en el trascoro del templo. En caso de que el grupo desee celebrar la santa misa en un horario distinto, podrá hacerlo en la capilla de San Pedro, siempre que no esté ocupada por otra celebración litúrgica y que el grupo no supere las cien personas, según ha informado el Arzobispado en nota de prensa.

En cuanto a los grupos de peregrinos que deseen realizar la visita cultural al templo primado podrán hacerla, previa reserva anticipada, durante el horario habitual de visitas, de 10.00 a 18.30 horas, con un descuento del 50% sobre el precio de la entrada.

Europa y América

Los grupos que se han dirigido al Cabildo para solicitar el acceso proceden de algunas diócesis españolas y de diversos países de Europa y de América. El más numeroso es el integrado por jóvenes de dos diócesis italianas, con un total de dos mil peregrinos, acompañados de sus obispos y de un numeroso grupo de sacerdotes, que celebrarán el sacramento de la penitencia en el templo primado el día 1 de agosto.

Otros grupos de peregrinos que pasarán por la Catedral proceden de Italia, Brasil, Colombia, Polonia y Chile. Desde Estados Unidos llegarán grupos de la diócesis de Boston y de Texas, Louisiana y Colorado. Entre los grupos españoles se encuentran jóvenes de Cádiz, de Murcia y de Alicante.

Con esta iniciativa, el Cabildo primado ha querido facilitar a los grupos de peregrinos participantes en la Jornada Mundial de la Juventud de Lisboa un espacio privilegiado para la oración, al tiempo que se les brinda la oportunidad de conocer la historia y la belleza singular de la catedral primada, sin que se produzcan interferencias en la habitual visita turística y cultural.