El Consorcio de la Ciudad de Toledo ha presentado este jueves la línea de ayudas para la rehabilitación de viviendas en el Casco Histórico, entre las que ha destacado una nueva convocatoria para este 2022 que tiene una partida de 120.000 euros para redactar los proyectos y recuperar los edificios en desuso en esta zona.

Los ciudadanos propietarios de un inmueble en situación de abandono tienen un plazo de dos meses para presentar su solicitud a la entidad, que de acuerdo a unos baremos, hará una valoración técnica del edificio y redactará el proyecto para poder recuperarlo con el objetivo de frenar su deterioro e incorporar entre 25 y 30 familias cada año a las nuevas viviendas.

De las 2.843 parcelas catastrales que constituyen el Casco Histórico de Toledo, el Consorcio ha calculado que actualmente hay 250 edificios residenciales deshabitados, 130 desocupados y una veintena de solares vacantes, que se pretenden rehabilitar para recuperar el patrimonio de la capital.

El gerente del Consorcio de Toledo, Jesús Corroto, ha señalado que una docena de propietarios ya han mostrado su interés por este proyecto "innovador", apoyando "la artesanía y los materiales nobles", con el que la entidad quiere "quitar el miedo de restaurar la ciudad" e incentivar a los ciudadanos a vivir en el Casco.

Los criterios de valoración para recibir las subvenciones, de concurrencia competitiva, son el valor patrimonial del inmueble, el estado de conservación del mismo, los sectores del Casco más abandonados, el número de viviendas que tenga y el coeficiente de cesión del edificio.

Viviendas y comercios

La segunda fase de estas ayudas contempla la rehabilitación de la vivienda, que tendrá una duración aproximada de tres meses, según ha dicho el gerente, y, en ella, se determinará cuántas viviendas se queda el propietario y cuántas gestionará el Consorcio para ponerlas a la venta con precios accesibles que facilite el acceso a una vivienda en el Casco Histórico.

"El análisis de la Comisión Ejecutiva de la institución es que hay una pérdida de barrio y, como consecuencia, al no haber población, hay una pérdida de locales de barrio, de comercio de proximidad, pero no solo desde el punto de vista material, sino que se están perdiendo los valores inmateriales del Casco", ha resaltado Corroto.

La segunda línea de subvenciones, por valor de 800.000 euros, va dedicada a rehabilitar viviendas residenciales, una concesión de ayudas habitual en la ciudad dirigidas a los residentes del Casco que realicen obras en sus viviendas y que incluye labores de asesoramiento técnico y de gestión administrativa de todos los trámites, así como su seguimiento.

Y la tercera de las convocatorias es de rehabilitación en especie, una nueva vía que arrancó el año pasado, que cuenta con una financiación de 300.000 euros (100.000 euros para 2022 y 200.000 euros para 2023) y, en este caso, el organismo asumirá las contrataciones oportunas de personal técnico.