Confidencial

Un factor esencial que hace más viable el proyecto de aeropuerto en Toledo

30 octubre, 2018 00:00

Los promotores del aeropuerto de Casarrubios (Toledo) tienen muy claro el proyecto y confían absolutamente en que va a salir adelante en el plazo de tiempo que se han marcado y con el apoyo de las dos comunidades autónomas afectadas, Madrid y Castilla-La Mancha, además del propio Gobierno central, que tiene las competencias en esta materia. Todavía les queda camino por recorrer para que el proyecto cuente con todas las autorizaciones necesarias, pero mientras tanto ya tienen prácticamente resuelta la financiación, que será con dinero privado al cien por cien, y perfectamente definido el plan de viabilidad de esta gran iniciativa que va a suponer una oportunidad de desarrollo y riqueza para la zona, una de las más deprimidas de Madrid y Toledo. 

Frente a las dudas y oposición de algún grupo que ya ha empezado a moverse contra el proyecto, los responsables de  Air City Madrid Sur, la empresa promotora de esta infraestructura aeroportuaria, cuenta con el espaldarazo de la Asociación de Compañías Españolas de Transporte Aéreo (ACETA), que considera que un segundo aeropuerto comercial en Madrid "promoverá la competencia en los aeropuertos", dado que "Aena tiene el monopolio en España como gestor aeroportuario", y contribuirá a "dar respuesta al incremento de la demanda" previsto para los próximos años. Este apoyo se constituye como un factor fundamental para que el proyecto salga adelante ya que la Aceta integra a algunas de las grandes compañías aéreas del mundo, incluida la española Iberia, que podría haberse mostrado más reticente. Pero ha sido todo lo contrario.

Desde Aceta, que además de Iberia, agrupa a compañías como Vueling, Air Europa, Evelop, Iberia Express, Air Nostrum, Binter y Canair, han recordado que la industria aérea prevé que el número de pasajeros aéreos se duplique en los próximos 20 años. "Hay que dar respuesta a ese aumento de demanda y un nuevo aeropuerto contribuirá a atender el crecimiento de pasajeros", indicaron recientemente a la agencia Europa Press.

Air City Madrid Sur, impulsora de este segundo aeropuerto comercial en Madrid y Toledo a 30 km de la capital, estima que el proyecto podría estar operativo en el año 2023 si obtienen las autorizaciones y trámites pertinentes, con una inversión inicial estimada de 148 millones de euros.

Así lo indicó recientemente el consejero delegado de Air City Madrid Sur, Javier Ruedas, en relación a la iniciativa para crear esta nueva infraestructura aeroportuaria en la región mediante la ampliación del aeródromo de Casarrubios-Álamo, zona limítrofe también con Castilla-La Mancha, que incrementaría el PIB regional en un 2%.

El Ministerio de Fomento ha recibido la propuesta por parte de sus promotores para ampliar el aeródromo de Casarrubios-Álamo y desplegar vuelos comerciales, que está siendo analizada desde el punto de vista técnico. Entre otras cosas, se evaluará si este proyecto puede afectar al tráfico aéreo existente y si implican afecciones medioambientales para la zona donde se proyecta.

Un informe preliminar de la Comunidad de Madrid considera viable técnica y financieramente el citado proyecto, si bien la autorización y el visto bueno a esta iniciativa depende del Gobierno central.

El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, considera que con este proyecto se "puede desarrollar un importante eje de crecimiento en el futuro". Además, se ha felicitado de que tras muchos años empiece a cuajar la idea de desarrollar un "importantísimo aeródromo privado pero con vocación e interés público".

El proyecto impulsado por Air City Madrid Sur plantea el incremento de capacidad de un aeródromo que cuenta con licencia desde 1996 y con compatibilidad de actividad aérea validada, pero que requiere, por ejemplo, la ampliación de pista de cara a la operativa de aeronaves con gran capacidad de pasaje.

Las estimaciones del proyecto constructivo contempla una pista principal de 3.200 metros, una terminal de 15.000 metros cuadrados en su primera fase con 6 millones de pasajeros al año y servicios aeroportuarios complementarios, con más de 50.000 metros cuadrados para mantenimiento de aeronaves y hangares.

Air City Madrid Sur calcula la creación de 5.600 empleos directos y 13.300 empleos indirectos en los primeros diez años de implantación y defiende el proyecto como alternativa a Barajas, garantizado la conectividad aérea en Madrid "ante cualquier contingencia que afecte al espacio aéreo".

El aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas ocupa el puesto número 14 en la clasificación mundial por tráfico internacional de pasajeros, según los datos del Consejo Internacional de Aeropuertos (ACI, por sus siglas en inglés) y el quinto en la UE. En 2017 batió su récord histórico con 53,4 millones de pasajeros (+5,9%) y 87.566 operaciones (+2,5%). Desde Barajas se operan vuelos a 192 destinos