El operador sueco de fibra óptica Adamo ha presentado sus nuevos planes de expansión en España, que contemplan el despliegue de su red de fibra en más de 300.000 hogares de Navarra, Lugo y Castilla La-Mancha, unos proyectos que tendrán una duración de dos años y medio y conllevarán, en su primera fase, una inversión de alrededor de 54 millones de euros.

Adamo, que actualmente ofrece servicios de Internet y telefonía con red propia en Cantabria, Cataluña, Valencia, Sevilla y Madrid, incide en que estos proyectos, que crearán 1.100 nuevos empleos tanto directos como indirectos, le ayudarán a alcanzar su objetivo de cubrir 1,5 millones de hogares en el año 2020 con su red de fibra.

En Navarra, Adamo invertirá un total de 19 millones de euros para desplegar su red de fibra óptica en áreas rurales y nuevas zonas urbanas de gran densidad, con el objetivo de llegar a 110.000 nuevos hogares. El despliegue de esta red, que estará lista para su comercialización en febrero de este año, es posible gracias a un acuerdo con su socios Onena y permitirá la creación de 390 empleos.

En el norte de Lugo, Adamo planea alcanzar los 85.000 hogares con el despliegue de su red de fibra también en áreas rurales y nuevas zonas urbanas de gran densidad. El proyecto, que requiere una inversión de 16 millones de euros y la creación de 320 empleos, se realizará con su socio Ibiocom con quien trabaja también en Cantabria. Además, al igual que en esa comunidad, la construcción de esta red, que comercializará desde marzo de 2018, utilizará la infraestructura de la red eléctrica Viesgo.

Asimismo, la operadora empezará a comercializar su nueva red en Castilla La-Mancha el próximo mes de febrero, que abarca aproximadamente 110.000 nuevos hogares gracias a un acuerdo con su socio Gestioniza. Adamo está desplegando este proyecto principalmente en la provincia de Toledo y Ciudad Real, con una inversión de 19 millones de euros y la creación de 390.

Gracias a la expansión de la red de Adamo, los habitantes y empresas en estas áreas podrán disfrutar de Internet a una velocidad de 1.000 Mb de descarga y 300 Mb de subida. Para la apertura y lanzamiento de la comercialización de su red, los primeros clientes en contratar el servicio de Adamo disfrutarán de una oferta de lanzamiento de tres meses de servicio gratuito. El cliente puede contratar 'Fibra FAST' de 1.000 Mb por 34,99 euros al mes o la Fibra esencial de 50Mb por 29,99 euros al mes

Estrategias de despliegue

En rueda de prensa, el consejero delegado y fundador de Adamo, Fredrik Gillstrom, ha incidido en que la estrategia de la compañía es desplegar donde no llegan los demás operadores, principalmente zonas rurales, zonas regionales y nuevas zonas urbanas de gran densidad, para que todos los hogares de España puedan tener servicios de fibra.

En este sentido, Gillstrom ha incidido en que su objetivo no es lanzar Adamo como una marca nacional con servicios en todas partes de España, sino llevar la fibra a todos los españoles que ahora mismo no la tengan.

Asimismo, ha defendido que desplegar infraestructura de fibra en zonas donde ya hay cobertura de otros operadores "no tiene gran valor" y la mejorar manera es compartir la existente para llevar la fibra a todos los demás lugares en el menor tiempo posible, De hecho, ha afirmado que están dispuestos a firmar contrato mayorista con Telefónica para que pueda desplegar en zonas donde no hay actualmente ningún operador.

Respecto a su estrategia de crecimiento futura, el consejero delegado de Adamo ha incidido en que su intención es crecer en infraestructura, para lo que siempre buscan "la mejor solución", lo que incluye el crecimiento inorgánico a través de adquisiciones de otras empresas. "Estamos evaluando, no estamos descartando nada", ha agregado.

Dentro de sus planes de despliegue, la compañía ha creado Adamo 'Fiberhood', una plataforma para que la demanda guíe la construcción de la red y así centrarse en los lugares donde más gente lo necesite. De esta forma, es el consumidor quien solicita que se despliegue fibra óptica en su localidad y Adamo, teniendo en cuenta la demanda, pone el foco en aquellas donde más gente lo solicite. Un pueblo tan solo necesita un 'embajador' y 30 personas interesadas en contratar sus servicios.