El Consejo de Gobierno ha aprobado este martes la orden de bases de ayudas para la mejora y modernización de regadíos en Castilla-La Mancha y un paquete de ayudas al sector forestal de la comunidad autónoma, que en conjunto suman 65,7 millones de euros.

Según ha explicado en rueda de prensa el consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, la convocatoria de ayudas para la mejora y modernización de regadíos se publicará en el próximo otoño y estará dotada con 31 millones de euros.

De este paquete de ayudas se podrán beneficiar las 168 comunidades de regantes que hay en Castilla-La Mancha, ya que se prioriza a las comunidades de regantes y sociedades de riego de la región a aquellos proyectos que tienen más agricultores y menor superficie individual.

Están dirigidas a las comunidades de regantes y Sociedades Agrarias de Transformación (SAT) que ya estén constituidas y tengan concesión de derechos de agua y se apostará redistribuir la riqueza con el agua, en una apuesta por "un modelo de regadío social que reparta la riqueza entre los habitantes del medio rural".

Entre los criterios de asignación de las ayudas tendrán prioridad aquellas comunidades de regantes o sociedades con mayor porcentaje de mujeres, de jóvenes y de titularidades compartidas, mayor número de regantes dentro de la Entidad Asociativa beneficiaria (Comunidad de Regantes o SAT), menor superficie media por regante y zonas declaradas de interés general o regional.

Las comunidades de regantes y las SAT podrán realizar las inversiones a partir de la resolución de la ayuda en el plazo de 12 meses, ha precisado el consejero, que ha señalado que incluso se podrán crear nuevos regadíos en algunas zonas que ya tienen la concesión por parte de las confederaciones hidrográficas, pero que no han podido ejecutarlos por falta de fondos.

Paquete de ayudas forestales

Asimismo, el Consejo de Gobierno ha aprobado un paquete de ayudas forestales dotado con 34,6 millones de euros, de los que 23,5 millones de euros van destinados a propiciar la realización de tratamientos selvícolas.

De ellos, 18 millones de euros se destinan a tratamientos selvícolas en montes particulares y 5,5 millones en montes de utilidad pública, ha indicado Martínez Arroyo.

Asimismo, con el fin de impulsar acciones relacionadas con la protección del medio ambiente se van a destinar cuatro ayudas dotadas con 11,5 millones de euros para socios de montes en los pueblos, para fomentar la comercialización del producto a través de cooperativas forestales y plan renove de tecnología y maquinaria.

Martínez Arroyo ha valorado particularmente una de las novedades del paquete de ayudas al sector forestal, que es la de recuperación de unas 200.000 hectáreas de montes, fundamentalmente de las provincias de Cuenca y Guadalajara, que hoy están abandonados ya que no se conocen sus propietarios.

El proyecto plantea recuperar estos 'montes de socios' recuperando el rastro de la propiedad de sus parcelas forestales, en el que van a trabajar, exclusivamente, personas que están habitando los municipios en zonas muy despobladas.

Rastro perdido a mediados del XIX

El rastro sobre a propiedad de estos montes comenzó a perderse a mediados del siglo XIX, por lo que la Junta va a tratar de localizar a sus propietarios y unirlos en un proyecto en común, del que ya hay precedentes en provincias como Soria, ha explicado Martínez Arroyo.

El consejero destacado que "es la mayor apuesta que se ha hecho nunca por el sector forestal en la región", que no solamente va a permitir poner en valor la superficie forestal de Castilla-La Mancha, "sino dar viabilidad a empresas, particulares y cooperativas forestales que llevan muchos años esperando que se convocaran estas ayudas".

Y ha subrayado que que el 45 por ciento de la superficie total de Castilla-La Mancha es forestal y que hay 2.147 empresas del sector que facturan 1.000 millones de euros al año.