Los escenarios de fútbol muchas veces se ven invadidos por espontáneos que buscan tener un momento de gloria con sus respectivos ídolos. No obstante, en la final de Champions de este sábado, la protagonista tan solo busca llamar la atención. Pasado el minuto 20 de juego, Kinsey Wolanski lograba burlar a la seguridad y empezar a correr por el césped semidesnuda, pues tan solo vestía un minúsculo body.

En el momento en el que se decidió a saltar al campo, Kinsey logró deshacerse de la seguridad sin mayores dificultades. Tanto fue así que en el instante en el que saltó de la grada y esquivó todas las barreras para plantarse en el terreno de juego, los vigilantes tardaron unos segundos de más en reaccionar que fueron suficientes para que la espontánea consiguieran su objetivo.

Su forma de vestir tampoco pasó desapercibida, pues al ir tapada tan solo con un minúsculo body, dejaba poco lugar a la imaginación de los espectadores. Además, Kinsey emprendió su carrera con los brazos en alto, lo cual daba buena prueba de que su intención claramente era llamar la atención y acaparar todos los focos del evento deportivo más importante del año, y consiguió su objetivo con creces.

La grada enloqueció con Kinsey

Su momento de gloria iba a durar hasta que alcanzó la línea medular del centro del campo, cuando los de seguridad consiguieron dar con ella y llevarla de vuelta a su butaca. También Kinsey se fue frenando poco a poco su carrera hasta llegar a la línea divisoria del terreno de juego, pero incluso agarrada por los vigilantes, la espontánea seguía con los brazos en alto buscando el clamor del público.

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