El partido entre Mallorca y Real Madrid ha quedado marcado por un nuevo y lamentable acto racista en las gradas de Son Moix. Un aficionado del conjunto bermellón realizó gestos de mono mientras los jugadores del equipo dirigido por Carlo Ancelotti celebraban el gol de Aurelien Tchouameni en la segunda parte. 

En las imágenes grabadas por Movistar+, se puede apreciar como el aficionado hace el gesto de un mono repetidamente cuando los jugadores del Real Madrid se acercan a la banda para felicitar a Tchouameni. Para terminar, el seguidor del Mallorca lanza su botella con la intención de golpear a los futbolistas.

Nacho y Rüdiger fueron conscientes del lanzamiento de la botella y rápidamente acudieron a hablar con el colegiado del partido, José María Sánchez Martínez, para después lanzarla fuera del terreno de juego. Además, curiosamente este lamentable episodio ocurrió cuando Vinicius todavía no había entrado al campo.

De hecho, la afición del RCD Mallorca le dedicó una sonora pitada a Vinicius cuando Carlo Ancelotti decidió darle entrada en la segunda parte del partido. El brasileño jugó la última media hora del encuentro y dejó grandes sensaciones de cara al cruce del próximo miércoles de los cuartos de final de la Champions League.

Este mismo domingo, el Mallorca se mostró muy contundente con lo sucedido en el campo y publicó un comunicado donde aseguró que tratará de erradicar cualquier acto racista.

"En el encuentro que disputaron ayer el RCD Mallorca y el Real Madrid, se han identificado imágenes en las que una persona realiza gestos racistas. El club ha activado el protocolo contra la violencia en el fútbol y está colaborando con la Policía Nacional en la identificación de dicha persona", explica el club.

"El RCD Mallorca no tolera ni tolerará ninguna manifestación de racismo y participa activamente en todas las campañas para erradicar esta lacra que va más allá del deporte. Agradecer una vez más a la afición su comportamiento ejemplar. Que un caso aislado no empañe el respeto y la deportividad del mallorquinismo", finaliza.

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No es la primera vez

Este tipo de actos no es la primera vez que ocurre en Son Moix. La temporada pasada ya se profirieron insultos racistas contra Vinicius desde las gradas del estadio del Mallorca. Recibió cánticos de "puto mono" por parte de un aficionado del seguidor bermellón.

Tras la denuncia del Mallorca y de las autoridades, la titular del Juzgado de Instrucción 3 de Palma, Martina Mora, citó a declarar al jugador del Real Madrid, quien compareció por videoconferencia. Vinicius aseguró que se había sentido ofendido al ver cómo la persona le había insultado sin justificación alguna.

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Como castigo, el Mallorca sancionó al joven retirándole su carnet de socio durante tres años y prohibiéndole la entrada a Son Moix. Además, las autoridades le impusieron una multa de 4.000 euros y la prohibición de pisar un evento deportivo durante 12 meses.