El Real Madrid parece estar de vuelta en el mercado de fichajes. Tras unos años agazapado y dando pequeños retoques al equipo, los blancos han acumulado potencial económico suficiente para dar algún gran golpe que otro en la próxima ventana de contrataciones. Así suenan ya que con fuerza, a pesar de que estamos todavía en octubre, nombres tan importantes como Mbappé, Haaland o Pogba. 

Sin embargo, la agenda madridista no se cierra solo a nombres galácticos, si no también a otras opciones para completar una plantilla que puede ser de escándalo, sin duda alguna la más equilibrada del mundo. Ahí aparece el nombre de Antonio Rudiger, actual central del Chelsea y que termina contrato con el equipo inglés este mismo verano. 

Rudiger se encuentra a poco más de dos meses de negociar su futuro con quien quiera sin tener que dar explicaciones a su club, una situación muy similar a la que se produjo en el caso de Alaba el pasado verano. Por ello, el Real Madrid quiere repetir su jugada y ya visualiza la llegada del central alemán para apuntalar una zaga que se ha ido reformando en los últimos años. 

David Alaba pasa el balón a un compañero REAL MADRID

El defensor bávaro entra perfectamente en los esquemas y en las necesidades que tiene el club en estos momentos. Se trata de un jugador que llegaría con la carta de libertad, es decir, completamente gratis, y que se marcha de Londres por no sentirse lo suficientemente valorado ni deportiva ni salarialmente. 

A sus 28 años, tiene sobrada experiencia en las grandes ligas europeas, por lo que su adaptación a España no sería un gran problema. Está acostumbrado a jugar y ganar en importantes citas y se adapta tanto a una defensa al uso con dos centrales como a un juego con tres defensas en la línea de atrás. Contundente, fiable por arriba y veloz a pesar de su envergadura. 

Se espera de él un fichaje sin fisuras, de rendimiento inmediato y que además no tenga unas expectativas salariales especialmente altas ya que no ocupaba un puesto de honor en la escala de suelos del equipo de Thomas Tuchel. Después de haber militado en equipos como el Stuttgart, la Roma o el Chelsea y de ser internacional con la selección alemana, podría ser el gran paso que le falta en su carrera. 

Antonio Rudiger, en un partido con el Chelsea EFE

'Caso Alaba 2.0'

La intención del Real Madrid no es otra que repetir la fórmula conseguida con David Alaba. Un jugador con experiencia, pero con carrera por delante, adaptado al fútbol europeo y en la recta final de su contrato para poder adquirirlo de manera gratuita. Por ello, si el conjunto blanco quiere dar otro golpe en el mercado, deberá apresurarse a cerrarlo cuanto antes para evitar que cualquier otro equipo se le adelante. 

Lo cierto es que los rumores que vinculan a Rudiger con el Real Madrid han surgido desde hace ya bastantes semanas, pero también con otros grandes de Europa como el Bayern de Múnich e incluso el Barça que están al acecho para aprovecharse de la condición del central alemán. En caso de ir a por él definitivamente, el Real Madrid adquiría a un futbolista que encaja a la perfección en su hoja de ruta. 

El equipo madridista tiene una defensa armada a la que podría faltarle un retoque. Con Alaba consolidado como jefe de la zaga, el alemán no taparía la progresión de Militao y no supondría un fichaje costoso como los de Koundé o Pau Torres, los cuales supondrían una traba para operaciones de mayor calado como la de Haaland o la de Kylian Mbappé. 

Eder Militao habla con David Alaba durante el partido REUTERS

La nueva defensa blanca

El Real Madrid está remodelando su defensa en los últimos años, la cual está cambiando poco a poco obteniendo grandes resultados. Las salidas de Sergio Ramos y Varane han dejado un gran hueco en el centro de la zaga, el cual fue rellenado el pasado año por Nacho y la gran irrupción de Militao. El pasado verano llegó Alaba y Nacho pasó a hacer esa función de polivalencia en los dos laterales, por lo que queda un hueco libre en la función de tercer o cuarto central. 

Jesús Vallejo todavía no inspira la confianza suficiente y ahí es donde estaría el hueco de un Rudiger que podría afrontar varios roles dentro de la plantilla sin problema alguno. Sería uno de los últimos retoques a la retaguardia blanca que en los últimos años ha contado con apariciones como las de Mendy o Miguel Gutiérrez y que en el futuro contará con más salidas como la de Marcelo. 

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