Isco y Marcelo son los dos últimos jugadores que afrontan la recta final de recuperación. Ambos jugadores se han estado entrenando con el Real Madrid en los últimos días, pero Zidane siempre quiere ir paso a paso con los lesionados para no provocar una recaída de mayor envergadura, por lo que ha trazado un plan para optimizar sus regresos a la dinámica habitual del equipo. 

La plaga de lesiones lleva varios meses azotando a la disciplina del Real Madrid. Los blancos llevan sufriendo bajas desde el 14 de julio, fecha muy cercana a cuando iniciaron la pretemporada con el stage de Montreal (Canadá). El primero que abrió la veda fue Brahim Díaz. El centrocampista sufrió "una lesión muscular en el bíceps femoral izquierdo" y desde entonces son 13 las lesiones que se han diagnosticado en el primer equipo. 

Brahim, Asensio, Courtois, Hazard, Mendy, Modric, Isco, James, Marcelo y Valverde han pasado por la enfermería del Real Madrid; incluso alguno de ellos en más de una ocasión. Un total de 10 futbolistas que han visto como se cortaba su progresión en este inicio de temporada, mermando así su rendimiento deportivo. 

Marcelo vuelve a entrenar

Isco y Marcelo, a punto 

Este factor ha afectado negativamente al nivel del equipo, ya que Zidane ha tenido que hacer malabares para afrontar los partidos, recomponiendo casi de forma semanal sus esquemas. De hecho, el Madrid afronta la séptima jornada de Liga sin laterales zurdos tras la lesión de Mendy días atrás y la aún recuperación de Marcelo. 

El brasileño e Isco son dos jugadores con los que Zidane quiere tener precaución en su recuperación. Algo que le ha hecho no querer arriesgar con ellos para la convocatoria del derbi frente al Atlético de Madrid, siguiendo la política que el técnico lleva implementando desde que llegó al Santiago Bernabéu en el mes de marzo.

Isco Alarcón, en un entrenamiento del Real Madrid

Hazard regresó poco a poco

Zidane quiere que sus jugadores se recuperen de sus lesiones con mimo y paciencia, no poniéndose en riesgo por un regreso vespertino. Para ello dosifica los minutos que cada uno recibe en su reincorporación a la dinámica del equipo. Algo que se observó con Hazard, flamante nueva estrella que contra el Levante regresaba de lesión y disputó solo media hora del partido. Posteriormente, contra el PSG, fue titular y disputó un partido completo.

El técnico francés quiere comprobar las sensaciones de sus jugadores para ver si están totalmente recuperados, por lo que la medición de minutos es clave en el proceso. Ya lo ejemplificó con Vinicius en la recta final de la temporada pasada, siendo este uno de sus primeros casos más sonados. 

Vinicius, el pionero

El brasileño se lesionó el 5 de marzo contra el Ajax y Zidane aterrizó en Concha Espina el día 11, por lo que dirigió su recuperación. El técnico galo no quiso arriesgar con el jugador y no le dio minutos hasta el 5 de mayo contra el Villarreal. Una decisión controvertida, ya que podría haber jugado una semana antes ante Getafe o Rayo Vallecano. 

Vinicius Júnior, durante el Real Madrid - Osasuna Reuters

Estos movimientos demuestran como Zidane intenta cuidar al milímetro el regreso de sus jugadores tras haber pasado por la enfermería. Una política con la que pretende garantizar una correcta recuperación. Algo que afectará directamente al rendimiento del equipo en el futuro. 

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