El 12 de diciembre del año pasado, el Atlético de Madrid cayó en Villarreal por un contundente 3-0. Añadido a las bajas que se llevó de ese partido como la tan importante de Oblak, los colchoneros se colocaron sextos en la tabla, pero todo cambió a partir de esa fatídica noche. Desde entonces, el Atleti no conoce la derrota a domicilio en ninguna de las tres competiciones que ha disputado esta temporada.

Quince han sido los desplazamientos que ha hecho el conjunto de Simeone desde ese día, de los que ocho han sido victorias y siete empates. Con salidas tan importantes como la del Bernabéu y el Camp Nou en Liga (1-1 en ambos), y otras como el viaje a Leicester, los rojiblancos han salido ilesos y no han dejado ganar a su rival en su estadio.

Una gran racha que podría romper el próxima martes su máximo rival, el Real Madrid. Los de Zidane tienen la necesidad de ganar en su estadio a toda costa e ir al Calderón con los deberes hechos, y el Bernabéu será una caldera para el conjunto del Manzanares. El Atleti sabe que tendrá enfrente nuevamente a una de las mejores delanteras de Europa, y Oblak tendrá que hacer una gran actuación si quieren seguir aumentando su racha.

EL MADRID QUIERE ECHAR EL CERROJO

El partido será decisivo y puede dejar sentenciada la eliminatoria, ya que ambos equipos irán a tope desde el minuto uno. El Madrid tiene claro que si no encaja gol en su estadio tendrá mucho más de cara la eliminatoria, aunque su rival intentará encajar los menos posibles y aprovechar las ocasiones que tenga.

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