Real Madrid y Barcelona se verán las caras el próximo 23 de abril en el Santiago Bernabéu. El encuentro cerrará los quince días tan intensos que le esperan al conjunto madridista con los partidos ante Atlético, Sporting y los azulgranas en Liga y la eliminatoria frente al Bayern que marcarán el futuro blanco tanto en Liga como en Europa. 

De cara al choque frente a los de Luis Enrique, el Madrid ya conoce quién será el árbitro encargado de repartir justicia. Se trata de Alejandro Hernández Hernández, del colegio de Las Palmas. El conjunto blanco ya conoce perfectamente a este árbitro, que fue el encargado de pitar el Clásico de la temporada pasada en el Camp Nou. En aquel encuentro, el conjunto madridista remontó el choque y logró hacerse con los tres puntos a pesar del intento arbitral por darle el triunfo al Barcelona. Hernández Hernández no solo expulsó a Sergio Ramos en el minuto 83, sino que también anuló un gol totalmente legal al Real Madrid tras pitar una falta inexistente de Bale sobre Jordi Alba cuando el galés remataba a la red un gran centro de Cristiano Ronaldo.

El choque de la jornada 33 de Liga tiene todas las características para ser decisivo en Liga. Es por ello que desde el club blanco están en alerta tras la decisión de colocar a Hernández Hernández para el Clásico. Temen un nuevo pucherazo arbitral a favor de los azulgranas, tal y como ha ocurrido en los últimos partidos entre Madrid y Barcelona. Lo visto en el encuentro de la primera vuelta, con los tres penaltis no pitados y el gol en fuera de juego de Luis Suárez, son el claro ejemplo de la protección arbitral con la que cuenta el Barcelona.

DIEZ PARTIDOS PITADOS AL MADRID

A pesar del recuerdo de lo vivido la pasada temporada en el Camp Nou, el Real Madrid tiene un balance positivo con Hernández Hernández. En los diez encuentros que ha dirigido, el club blanco se ha llevado el triunfo en ocho ocasiones y ha perdido en dos, frente al Málaga en la temporada 2012/2013 y frente al Celta en la 2013/2014. Aunque los datos invitan al optimismo, los últimos 'accidentes' a favor del Barcelona, como la expulsión de Mangala en el 4-2 ante el Valencia del pasado 19 de marzo, ponen en aviso a un Madrid que teme más al árbitro que al conjunto azulgrana.