IKEA ha logrado por méritos propios convertirse en uno de los principales fabricantes de muebles a nivel mundial. Conforme la tecnología avanza, esto exige que el mobiliario se adapte a nivel tecnológico, y acaban de crear el cargador inalámbrico más barato que se puede recomendar.

Es por eso que Ikea lleva ya un tiempo invirtiendo en la domótica y el hogar conectado con bombillas, altavoces y mucho más. Y también es uno de los grandes impulsores de la carga inalámbrica, teniendo incluso en su cafetería mesas con bases en las que puedes conectar tu móvil.

El fabricante sueco ha dado un golpe sobre la mesa con un cargador inalámbrico de 5 euros, un potencial superventas. Pero ¿merece la pena este cargador? Analizamos sus características y te explicamos por que deberías (o no) apostar por él.

Ikea y su cargador de 5 euros puede ser lo que la carga inalámbrica necesita

Normalmente la adopción de una tecnología nueva suele ser un proceso lento. Primero es cara y conforme va pasando el tiempo se abarata y llega a todo el mundo. La carga inalámbrica sigue siendo una de esas tecnologías que actualmente sólo se ve en móviles de gama alta, una tecnología cuya adopción ha sido lenta pero que poco a poco se va extendiendo.

Para que la carga inalámbrica sea un tema común en el mercado de la tecnología móvil son imprescindibles dos pasos: que los móviles baratos sean compatibles y que existan cargadores baratos. Ikea quiere solucionar el segundo punto.

No es que los cargadores inalámbricos baratos sean una novedad, pero un cargador inalámbrico barato y de una marca que inspire confianza es mucho menos común. Aquí es donde entra LIVBOJ, un producto con un nombre tan característico como cualquier producto del fabricante sueco.

5 euros cuesta este cargador inalámbrico. En esos 5 euros nos estamos llevando un cargador que estéticamente es discreto (en colores blanco y negro) y que ofrece conexión por USB tipo C, algo que no es tan común en este tipo de cargadores. Además es ligero y fácil de llevar en cualquier lugar.

Tiene una serie de contrapartidas, y es que la carga tiene una velocidad máxima de 5 W, mucho más lentos que los 18 W de los móviles con carga rápida por cable. Tampoco incluye adaptador de corriente ni cable, algo excelente para reutilizar los que ya tenemos en casa y evitar los desperdicios electrónicos, pero que si requieres un pack completo puede subir un poco el precio.

Sin haberlo probado no podemos decir aún nada de la experiencia, pero nos ha llamado mucho la atención para lugares como la mesita de noche, y es que si eres de los que carga el móvil por las noches tampoco te importa perder la carga rápida. Esta misma tarde voy a Ikea a por uno, así que os contaremos próximamente más de la experiencia.

• Cargador LIVBOJ en color blanco – 5 euros.
• Cargador LIVBOJ en color negro – 5 euros.