Steve Jobs se equivocaba: se ve más porno en el iPhone que en Android

Steve Jobs se equivocaba: se ve más porno en el iPhone que en Android

El Androide Libre

Lo peor de escribir en un blog de tecnología

¿Alguna vez te has preguntado sobre cómo sería escribir en un blog de tecnología? tiene sus partes negativas, y hablar de filtraciones es la peor.

22 marzo, 2019 12:45

Hoy en día, escribir en un blog para muchos es más que una afición y se ha terminado convirtiendo en un trabajo. Como en cualquier otro trabajo, hay partes que nos gustan más y partes que nos gustan menos; y hoy vamos a hablar de la que consideramos que es la peor parte de escribir en un blog de tecnología, bajo nuestro punto de vista.

¿Qué hacemos normalmente en El Androide Libre?

Escribir artículos a veces nos exige probar aplicaciones que sabes que son malas, pero que a veces nos sorprende.

Hace un tiempo, mi compañero Fernando explicó cómo es un día habitual en El Androide Libre. Dos años y medio después de ese artículo, nuestro trabajo y rutina sigue siendo prácticamente la misma (aunque el pobre ya está curado de espantos y ya no lo pasa tan mal). Con los años y la experiencia nos hemos vuelto un poco más hábiles, pero al final la esencia se mantiene.

¿Y a qué nos dedicamos? A escribir.

¿Vale cualquier tema? No es tan sencillo.

La peor parte de escribir en un blog: hablar de filtraciones

Todo medio de contenidos sigue su propia estrategia, sea un periódico, un blog, un podcast, un canal de YouTube. El mayor reto a la hora de hablar a un público es identificar cuál es tu público potencial y desarrollar una estrategia de contenidos.

No consiste en mirar las analíticas y replicar el mismo tema una y otra vez, o crear titulares sensacionalistas para conseguir el click, sino una labor de ofrecer contenidos de valor para el lector. A partir de ahí, intentamos crear el contenido que pensamos que tiene mayor relevancia e importancia, ya sean noticias, tutoriales, análisis o contenido más humano, como el artículo de hoy.

¿Y qué es lo peor? Hablar de filtraciones, sin ningún tipo de duda.

Esta es una conversación cualquiera en uno de los 70 grupos de Telegram que tenemos en El Androide Libre. Paolo, nuestro jefe, suele enviarnos de vez en cuando alguna pieza que no hemos publicado y que considera de interés (bueno, Paolo en esta ocasión, pero es un habitual). Normalmente discutimos mucho cada artículo, y decidimos si tiene relevancia.

¿Pocophone F1 Lite filtrado? De ser cierto es un tema de gigantesco interés. En esta conversación decidimos que no era información de fiar ya que consideramos que los bencharks no son una fuente fiable de noticias.

Qué divertido fue descubrir varios días después en XDA Developers que esa filtración era una burda mentira, destapando el ansia de información que inunda a los medios y a los lectores.

¿Y por qué seguimos escribiendo sobre filtraciones?

No todas las filtraciones son falsas, y casos como el Google Pixel 3 nos lo demuestran.

A día de hoy, la peor parte de trabajar en El Androide Libre (y supongo que en cualquier otro medio de tecnología) es hablar sobre filtraciones. Principalmente lo considero una pérdida de tiempo que podría invertir en artículos de mejor valor. Saber algo o todo sobre un producto no tiene valor hasta que es posible comprarlo. Pero es un tema que interesa a los lectores, que al final es quien tiene mayor peso en nuestras decisiones editoriales.

Por poco que nos guste, las filtraciones son noticias que están a la orden del día.

Pero seguiremos escribiendo sobre filtraciones. Seguiremos evaluando cada posible noticia con la relevancia que pueda o no tener en el blog. A veces porque creamos que es una filtración con gran probabilidad de ser cierta, y otras veces para contar cosas alrededor de dicha filtración, como le ha ocurrido al Pocophone F1 Lite.

Al final, las personas detrás de los blogs somos todos humanos. En este caso hemos podido esquivar con cierta destreza la bala del Pocophone F1 Lite, pero a saber cuántas filtraciones nos hemos comido con patatas en el blog. Porque como dije aquel 15 de marzo, al final solo nos acordamos de las filtraciones que terminan siendo ciertas.