DxO Mark anuncia la pronta puesta a la venta de su cámara externa para móviles. Y nosotros nos preguntamos: ¿es una buena idea? Para los móviles más baratos sí.

Si echamos la vista atrás, tan solo 5 o 6 años, comprobaremos que las cámaras móviles tenían una calidad decente, pero no llegaban a equipararse a una compacta. Esto es algo que los smartphones superaron, no solo en la gama más alta: cualquier móvil más o menos decente ya captura grandes imágenes y vídeos. Así que, ¿quién quiere una compacta? Podemos reinventarla convirtiéndola en un accesorio.

Las cámaras externas para smartphones o modulares no son nada nuevo. Por ejemplo, hace unos años Sony lanzó este tipo de dispositivos que aseguraba excelentes fotos con un hardware menor al de cualquier réflex. La intención era mejorar un aspecto tan crucial en un smartphone como es la cámara, igual que ocurre con el accesorio fotográfico de DxO Mark para móviles. Sí, los mismos que otorgan puntuación a las cámaras.

Pongamos que tienes un móvil decente al que quieres potenciar su lado fotográfico. Pues solo tienes que colocar la DxO One gracias al USB incorporado y listo: tu móvil será el visor de la cámara. Parece algo superfluo y fuera de lugar; hasta que te das cuenta de que puede convertir un smartphone de 200 euros en una cámara de mayor calidad que la de un móvil de alta gama. Y manteniendo la portabilidad.

Cámara externa, un accesorio prescindible que soluciona las carencias fotográficas

Uno de los apartados clave en cualquier análisis es el de la cámara. Los fabricantes lo saben; de ahí que innoven en ese campo cuando desarrollan cualquier smartphone, especialmente los que suben de 700 euros. Es algo que debemos exigir: si nos cobran tanto dinero deben hacer excelentes fotos.

Cuando un fabricante nos cobra más de 700 euros por el móvil debemos exigirle la mejor cámara

¿Suele ser mala la cámara de los móviles de gama media? Como es lógico, no podemos pedirles la mismas prestaciones en comparación, pero existen notables excepciones que desmienten la regla. El Moto G5S, el Xiaomi Mi A1, BQ Aquaris X… Móviles por debajo de los 300 euros que ya hacen buenas fotos; con amplio espacio de mejora con una cámara externa, claro.

Tomemos como ejemplo la DxO One, una cámara externa que, si bien no ha salido al mercado, está anunciada su próxima distribución. No es barata ya que se va a los 499 dólares, pero en conjunción con un móvil económico el precio final no se dispara «en exceso» (recalco el entrecomillado, que es mucho dinero). De esta manera tendríamos un smartphone con el que compartir las imágenes y utilizar como móvil; disponiendo de una cámara accesoria capaz de potenciar la fotografía hasta la frontera semi profesional.

Una buena cámara externa es el complemento ideal para quien quiera una compacta con conectividad

Es un accesorio caro y no apto para la mayor parte de los usuarios, sí, pero ofrece una experiencia añadida que se puede utilizar en otros smartphones; por lo que no perderemos su capacidad al vender el móvil, algo que ocurre con los Moto Mods, por ejemplo. DxO Mark apuntó primero al segmento del iPhone, ahora llegará a Android. No tiene demasiado sentido en la gama donde se mueven los Note 8, Galaxy S8, LG V30 o Pixel 2 XL, pero sí le veo cierta utilidad para la gama media y baja.

Las cámaras externas no prometen convertirse en un accesorio de éxito

Mi opinión es que sí, una cámara externa puede mejorar el lado más flojo de un móvil barato, pero no por ello veremos más proliferación de estos accesorios. Dado que la mayor parte de usuarios utiliza la cámara para tomar fotos sencillas sin preocuparse de las condiciones, vender un accesorio semi profesional de este tipo terminaría encajando más en la gama alta que en la baja. ¿Y para qué quiere una cámara externa el dueño de un móvil «top» cuando su smartphone ya le ofrece lo mejor en el campo fotográfico?

Una cámara externa puede ser cara para el dueño de un móvil barato e inútil para quien tiene uno caro

La mayor ventaja de este tipo de cámaras es la de no tener limitado el espacio. Los sensores de móvil deben ser compactos, algo que dificulta la entrada de luz. Con un mayor objetivo, junto a un tamaño de sensor más grande, una cámara externa puede hacer frente a las limitaciones físicas de la móvil. Y mejorarla, sino complementarla.

Apuntan maneras, pero supone añadir un componente que los smartphones ya tienen por duplicado. O triplicado, que la doble cámara es cada vez más común en Android. Tienen muchas ventajas, también diversos inconvenientes, especialmente el precio; o la incomodidad de uso y la posibilidad de que se pierda al ser un accesorio que se guarda aparte.

¿Comprarías una cámara para tu móvil como la DxO One? ¿Crees que vale la pena disponer de un segundo hardware fotográfico siempre a mano?