Recopilamos una serie de situaciones que muchos habréis vivido. Momentos que te hacen pensar «Oh no» en cuanto ocurre. Pero mejor tomárnoslo con humor, ¿no?

Nuestro smartphone nos facilita tareas de nuestro día a día. Desde gestionarnos nuestras citas en la aplicación de calendario hasta inmortalizar un momento concreto con la cámara. Pero como todo, tiene su lado oscuro, tenebroso y temible… Situaciones que te hacen daño en nuestro tierno y frágil corazón androide.

Seguro que todos los que leáis este artículo os sentiréis identificado con al menos una de las situaciones que os mostramos aquí. Son situaciones que por tu mente pasa un «Oh no» y que hay que afrontar sin soltar una lágrimita.

Claro está, si se os ocurre alguna situación parecida, dejadla en los comentarios. Ya sabéis el dicho típico español: «Mal de muchos, consuelo de tontos«.

Tarifa de datos acabada a mitad de mes

Día 15 del mes, te vibra el móvil. Todo parece inofensivo hasta que ves el mensaje: «Has consumido el 100% de tus datos de este mes«. Aquí ya te mentalizas que tendrás que esperar un ratito para descargar notas de voz, olvídate de entrar en Twitter y las fotos de Instagram mejor para cuando estés en casa. Ah, y lo de jugar a Clash Royale en el bus para el mes que viene.

Batería al 10% después de comer y sin cargador en el trabajo

Es de mis favoritos, estar usando el móvil toda la mañana para que, después de comer, ya te llegue la alerta de batería baja. Toca poner el modo ahorro de batería y que aguante lo que tenga que aguantar. Toca racionar cada uso del móvil.

Te compras un móvil y al mes sale el nuevo modelo

Has ahorrado un largo tiempo para ese modelo de alta gama que tanto te gusta. Lo pides, te ha llegado y estás muy contento con él. Pero al mes que viene el fabricante decide quitarte la ilusión como quitarle la ilusión a un niño lanzando un nuevo modelo. ¿Su precio? El mismo que te costó a ti y el tuyo, rebajado. Si os ha pasado es normal que la lágrima caiga.

Se pega polvo en el cristal templado al ponerlo

Un cristal templado es la mejor opción si queremos proteger la pantalla de nuestro smartphone. Son resistentes y le dan una segunda capa de protección. El problema está cuando mientras lo pones, una mota de polvo decide colarse y adherirse al pegamento del cristal templado. A la basura los 8€ del cristal templado.

Un auricular deja de funcionar

Cualquier día es un momento perfecto para que uno de tus dos auriculares deje de funcionar. Ese momento en el que ya te mentalizas que tendrás que pasar por caja para comprar unos nuevos auriculares porque claro, no vas a ir como si fueses sordo de un oído. Aunque bueno, también es buena forma para escuchar lo que te dice la gente.

No te despiertas porque no sonó la alarma

Los rayos de sol y el cantar de los pájaros sonido de los coches te despiertan. Miras tu móvil y… ¡Sorpresa! son las 10:00 y tenías que despertarte a las 8:00. Tu móvil ha decidido no despertarte con su alarma (porque puede que jamás la activaste) o porque haya decidido suspender la aplicación para ahorrar la batería en el caso de algunos móviles Xiaomi.

No sonó la alarma porque no conectaste el móvil bien al cargador

Pero si hay algo que duela más que no suene la alarma, es que no lo haga porque el móvil está apagado. ¿Motivo? Se acabó la batería. Ahora llegas tarde al trabajo y sin batería en el móvil. Combo.

Tranquilos, este artículo puede herir sensibilidades de muchos por rememorar situaciones dolorosas de nuestro pasado con un móvil Android. Si queréis llorar, nadie os juzgará.

Viñetas | Alex Norris