Blacklane es una plataforma para contratar coches con conductor que poco tiene que ver con Uber y Cabify. Opera en España desde 2013, tiene sede en Berlín y está disponible en 10 ciudades de nuestro país. Se trata de una compañía de VTC tradicional, de las que ya realizaban trayectos privados antes de que Uber y Cabify apareciesen en el mercado.

Sin embargo, aunque sus operaciones - en su mayoría traslados desde y hasta el aeropuerto - están fuera del conflicto entre el Taxi y las VTC, también se han visto afectados por las huelgas del Taxi. Según confirman fuentes de Blacklane a EL ESPAÑOL, han tenido que cancelar servicios “por la seguridad de los pasajeros”.

“Blacklane ha perdido centenares de trayectos debido a las huelgas del taxi en Barcelona y Madrid, hemos tenido que rechazar las demandas de algunos pasajeros por dos razones. La más importante es la seguridad de los usuarios ante el riesgo de violencia en los aeropuertos y en el centro de las ciudades”, explican fuentes de Blacklane a este periódico.

Esta compañía no es la única operadora de VTC tradicional que ha velado durante estas últimas semanas por la seguridad de sus pasajeros. En Madrid se han dejado ver carteles en los parabrisas de algunos vehículos que rezaban “VTC tradicional, ni Uber, ni Cabify”, con el fin de que los piquetes no atacasen a esos coches.

Desde la plataforma con sede en Alemania añaden que “la segunda razón es que las restricciones de tráfico ocasionadas por las manifestaciones hacíaN imposible la recogida de nuestros clientes y su trayecto hacia el destino solicitado”.

En el lado positivo, “ha aumentado la demanda” del servicio que ofrece Blacklane. No obstante, los pasajeros de esta compañía suelen reservar sus trayectos a través de la aplicación o de la página web “con días de antelación de media”, por lo que si esa nueva demanda, surgida ante la imposibilidad de usar otro tipo de transporte, se ha realizado con menos de una hora de antelación, posiblemente la compañía no ha podido realizar el servicio.

Precontratación y geolocalización

A pesar de la nueva normativa catalana, el decreto que incluye la precontratación con al menos 15 minutos de antelación (ampliado hasta una hora en Barcelona), y la eliminación de la geolocalización de los vehículos, Blacklane se muestra tranquilo. La compañía asegura que la programación de sus trayectos con una hora de antelación ya forma parte de su política en las “300 ciudades y 60 países donde opera”.

Preguntados sobre la demanda del Taxi que pedía ampliar esas reservas hasta las 6 o 12 horas de antelación, desde Blacklane explican que en ese caso sí se verían afectados, aunque la compañía insiste en que “la mayoría de nuestros trayectos se reservan con antelación” y precisa que se “podrían hacer ajustes técnicos” para adaptarse.

En cuanto a la geolocalización, la plataforma explica que los clientes “no saben dónde están los vehículos de Blacklane cuando se mueven hasta su punto de recogida”, por lo que esta medida tampoco afectaría a su actividad. 

La compañía no revela el número de vehículos o conductores de los que dispone aunque asegura que trabaja con empresas de “chóferes profesionales que cuentan con los seguros, permisos e inspecciones necesarias para operar en cada país”.

Desde Blacklane esperan que la crisis entre Taxis, administración y VTC “se resuelva pronto para que todos podamos volver a la carretera con seguridad”.