Veinte años son más que suficientes para adaptarse a un escenario sin 'coches fósiles'. Así lo cree Teresa Ribera, ministra de Transición Ecológica, que este lunes ha defendido el objetivo de prohibir la matriculación de vehículos de gasolina, diésel, gas e híbridos en España para el año 2040.

"Creo que 20 años es un plazo razonable para gestionar dicha transformación", ha indicado la ministra. Bajo su punto de vista, estamos viviendo tiempos de cambios importantes y "lo peor que nos podemos encontrar es que nos pasa un tsunami por encima". "Tenemos que anticipar esa preparación por parte de la industria", afirmó en 'La mañana de la 1'. 

La semana pasada se dio a conocer el anteproyecto de la futura Ley de Cambio Climático y Transición Energética, un documento en el que la cartera de Ribera sintetiza la orientación que se quiere dar a la política energética de cara a 2030 y 2050, año en que la UE pretende tener totalmente descarbonizada su economía.

Entre las medidas que recoge el documento, la prohibición de los coches contaminantes, en línea con lo que han hecho países como Reino Unido o Francia, no gustó en el sector automotriz. Para los fabricantes de coches la medida es "excesiva y acelerada", en palabras de la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac). 

Desde el Ejecutivo han querido calmar las aguas y ya se han reunido con las asociaciones para aclarar el contenido de este borrador. La Asociación Nacional de Importadores de Automóviles, Camiones, Autobuses y Motocicletas (Aniacam) asegura que el encuentro fue distendido y quedó claro que el proceso de descarbonización tendrá unos plazos que "no tienen que poner en peligro" la capacidad productiva de las fábricas en España, de sus empleados, del sector de la distribución y de los consumidores.

La cita, con representantes de Industria, Comercio y Turismo y de Transición Ecológica, sirvió para que desde la organización pidieran al Gobierno que marque las metas "con tiempo" para que tanto los privados como los ciudadanos puedan adecuarse. En las próximas semanas se realizarán nuevas reuniones para seguir trabajando en que la norma definitiva asegure la estabilidad del sector.

Electrolineras obligatorias

Ribera también se ha referido a la obligatoridad de poner puntos de recarga para vehículos eléctricos en todas las gasolineras. Según la ministra, estas instalaciones ya están acostumbradas a cumplir con aspectos más complejos que su adaptación a electrolineras y hay ciertas petroleras y eléctricas que ya se están posicionando en relación a este cambio de negocio.

Para Ribera, una de las claves en la transformación hacia un mundo sin combustibles fósiles está en evitar que se produzcan "cuellos de botella". Es decir, que no se logre llegar a tiempo a la transformación porque las infraestructuras no están preparadas para acoger esta evolución. "Esto requiere cambios en garajes y también en las vías públicas", apuntó.

Su cartera tiene aún que presentar el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima, un documento que dará más detalle sobre la política energética que seguirá España en los próximos años. Según Ribera, habrá más noticias sobre el tema en varias semanas, dado que tienen que presentarlo en Bruselas antes de que finalice el año.