Pasadas las tres de la tarde del 15 de abril de 1989 medio millar de personas luchaba por su vida sobre el césped de Hillsborough. 96 de ellos fallecieron. El exceso de aforo, la escasa previsión y la falta de reacción de la policía provocaron la mayor tragedia vivida en un campo de fútbol. Según The Sun, bajo el titular 'La verdad', mientras esas personas yacían sobre el césped, los aficionados del Liverpool orinaban sobre sus cuerpos, pegaban a los policías que trataban de salvar vidas e incluso -citando a un policía- agredían sexualmente a una de las menores que perdió la vida. 23 años después el periódico pidió perdón y contó 'La verdadera verdad'. Pero Liverpool no perdona. Ahora, The Sun no es bienvenido en la ciudad, donde sobrevive a duras penas ante el boicot: no se vende en gasolineras, tiendas y grandes supermercados y sus periodistas están vetados por Liverpool y Everton. "No lo vendas, no lo compres, no lo leas" es el lema que miles de ciudadanos repiten y muestran en taxis, escaparates, bares e incluso cubos de basura. El 'eclipse total del sol' ya es una realidad. 

Para entender el actual boicot hay que remontarse a la primavera de 1989. Después de que 96 personas fallecieran en un campo de fútbol, el periódico, con su editor Kelvin MacKenzie al frente, hizo suya la tesis de que fueron los propios 'scousers' quienes provocaron una avalancha mortal en Leppings Lane, donde se agolpaban miles de seguidores del Liverpool minutos antes de que diera comienzo la final de la FA Cup ante el Nottingham Forest. La portada del periódico, que nadie en la ciudad de Merseyside olvida, ofrecía 'La verdad': "Algunos aficionados robaron a las víctimas, algunos orinaron sobre policías valientes, algunos golpearon a los agentes mientras hacían el boca a boca a las víctimas". 

Portada de 'The Sun' tras la tragedia de Hillsborough

Margaret Aspinall, la dama de hierro que tras perder a su hijo en la tragedia lideró a las familias hasta encontrar la justicia, recordaba para EL ESPAÑOL el daño de la información de diferentes medios. "Era gente inocente que no había hecho nada malo, solo ir al fútbol. Y de repente teníamos a todo el país culpándonos. Toda la prensa en nuestra contra, haciéndole los titulares al gobierno de Margaret Thatcher. Fue The Sun quien hizo los famosos titulares. Tengo alguno guardado, si vieras los periódicos... Por el amor de dios, era todo muy desagradable. El mensaje caló en los aficionados de otros clubes, nos gritaban por la calle: 'Míralos, los scousers', decían. Nos hundíamos. Era todo el país contra Liverpool, contra la ciudad de los disturbios de Toxteth, contra la ciudad de los pobres. Siempre quisieron manchar la imagen de la ciudad, de Merseyside. Es cierto que hubo una época complicada, pero lo único que hacíamos era luchar por los derechos, adelantarnos a las injusticias. Todo iba mal, y por alguna razón utilizaron Hillsborough para hundirnos". 

Las campañas para vetar a este periódico se sucedieron durante años. Anfield se convirtió en un constante recordatorio para sus ciudadanos: 'Don't buy the sun' (No compres The Sun). 23 años después, en septiembre de 2012, The Sun mostraba su arrepentimiento. En una nueva portada, reconocían la responsabilidad de la Policía: "No se debió culpar a los aficionados, pero la policía encubrió todo con mentiras y nosotros y otros periódicos nos tragamos todo", decían en su interior. "Nos hemos disculpado hace años y lo volvemos a hacer". Se referían a las palabras del propio James Murdoch, que en 2011 se pronunció públicamente para evitar el boicot a todo el grupo News Of the World. "El boicot es simbólico, pero después de 23 años es más fuerte que nunca", decía el portavoz de la campaña Peter Hooton en la BBC. "No sentimos que la disculpa sea verdadera, y no pararemos hasta que veamos que se hace justicia. La mayoría de los seguidores nunca perdonará a ese periódico y nunca lo comprará"

The Sun se disculpa por la información ofrecida

El perdón, de nuevo, no fue suficiente. Tras el reconocimiento de la Justicia de que los aficionados no tuvieron nada que ver con la tragedia, ya en 2016, los ciudadanos se sintieron poderosos. En el seno de la afición 'Red' nació 'Total eclipse of The S*n' (Eclipse total del sol). Crearon pancartas, folletos, pegatinas y todo tipo de carteles para empapelar la ciudad y animar a sus vecinos a salir a la calle para boicotear la venta de este periódico. Pintaron los taxis y fueron puerta por puerta a las pequeñas tiendas de cada barrio: "No lo vendas, no lo compres, no lo leas". Ian y Paul, los creadores, apenas contaban con decenas de ayudantes. Ahora son miles. Su grupo en Facebook suma más de 50.000 personas en una ciudad de apenas medio millón de habitantes. Durante meses, han ocupado las puertas de grandes superficies y enviado mensajes: "He dejado de comprar en vuestro establecimiento al saber que seguís vendiendo The Sun". La presión ha hecho efecto.

"Vendemos periódicos, no vendemos The Sun"

En un año se han unido 300 tiendas, los dos equipos locales han negado el acceso a sus periodistas, así como los clubes de menor categoría, 11 juntas locales han apoyado la campaña y pedido a sus tiendas el cese de su venta, 76 taxis y cientos de establecimientos han difundido su mensaje. Paul Collins, fundador de este movimiento, explica a EL ESPAÑOL que The Sun es residual en la ciudad. "Todo el mundo nos apoya por lo que hizo esa gente. El boicot ya es real. No estoy seguro de que esté totalmente muerto, pero está claro que no se vende mucho aquí. Todavía queda en algunas partes, pero casi siempre son ventas de algún modo secretas".

Las gasolineras de BP, SHELL, ASDA, Morrisons y TESCO ya se han sumado al boicot. Pero este martes la campaña conseguía uno de sus mayores logros: Sainsbury's, junto a TESCO el principal supermercado de Inglaterra, dejaba de vender el periódico en Liverpool. 

Mapa de las gasolineras donde ya no se vende The Sun

 

Liverpool y Everton se sumaron al boicot

El pasado mes de febrero, tras una reunión de los directivos del Liverpool con familiares de las víctimas, anunciaron que los periodistas y fotógrafos de este periódico no tendrían acceso a Anfield, a las instalaciones deportivas y a ninguna entrevista con el entrenador Jürgen Klopp. El propio técnico lo materializaba negándose a responder a un periodista: "No hablo más con vosotros. Puedes escuchar, pero no puedes preguntar. No por lo que dijeras, solo porque trabajas para The Sun. Puedes escuchar y puedes escribir, pero no puedes preguntar". 

Jurgen Klopp Refuses To Answer Question From The Sun Journalist

Una decisión respaldada por Hillsborough Family Support Group y por el ayuntamiento local, muy activo en esta causa a través de su alcalde Joe Anderson, quien, entre otras acciones, instó posteriormente al Everton a prohibirles la entrada a su estadio después de que el MacKenzie, precisamente editor del periódico en 1989, llamara "gorila" a Ross Barkley, de origen nigeriano, por acabar a puñetazos en una discoteca, añadiendo que los que ganaban dinero en Liverpool eran traficantes de drogas: "Vuestra falta de acción para vetar al S*n en ruedas de prensa es un puñetazo en la cara a nuestra ciudad. Actuad ya".

Semanas después, el Everton siguió sus pasos: "Hemos vetado la entrada de sus periodistas a Goodison Park y a cualquier zona de entrenamiento del club. Cualquier ataque a esta ciudad es inaceptable", decía el club en un comunicado. Everton y Liverpool, de nuevo unidos en la misma causa que toda la ciudad: "Justicia verdadera".

Verdadera justicia