Las acusaciones por acoso sexual contra el actor Geoffrey Rush, ganador de un Oscar por su interpretación en la película Shine, se siguen acumulando. Esta vez ha sido la actiz australiana Yael Stone, una de las protagonistas de la serie Orange is the New Black, la que ha acusado de comportamiento inapropiado a Rush, que también ha participado en filmes como El discurso del Rey o la saga de Piratas del Caribe.

Stone ha denunciado en una entrevista con The New York Times que el actor había bailado desnudo frente a ella, utilizado un espejo para verla mientras se duchaba, le enviaba mensajes de texto sexualmente explícitos y que le tocaba la espalda de una manera "no deseada" y "muy sensual". Ambos fueron compañeros durante dos años en una producción teatral estrenada en Sidney en 2010, Diario de un demente.

"Recuerdo que miré hacia arriba para ver que había un pequeño espejo de afeitar sobre la parte superior del cubículo de las duchas y lo estaba usando para mirar hacia abajo a mi cuerpo desnudo", ha contado Stone. "Creo que lo hizo como una broma, pero me hizo sentir insegura y observada".

En cuanto al episodio del baile desnudo, Stone ha revelado que Rush, cuando ambos se encontraban en un vestuario compartido, "salió de la ducha con la toalla en la mano y desnudo y comenzó a bailar delante de mí con su pene fuera". "No había ninguna parte de mi cabeza que considerase hablar con alguien", ha explicado la actriz preguntada sobre por qué no denunció la situación en aquel momento. "¿Qué iban a hacer? ¿Despedir a Geoffrey y quedarse conmigo?".

Rush niega las acusaciones

El actor, en un comunicado que recoge The Guardian, ha negado todas estas acusaciones y las ha tachado de "incorrectas", asegurando que algunos casos "han sido sacadas de contexto completamente". "Es evidente que Yael se ha sentido molesta en ocasiones por el enérgico entusiasmo que generalmente muestro en mi trabajo", ha asegurado Rush. "Lamento sincera y profundamente si le he causado alguna angustia. Sin duda, nunca ha sido mi intención”.

Por último, el actor ha querido dejar claro que no ha perdido el contacto con Stone desde los supuestos episodios de acoso: "Cuando actuamos en Diario de un demente hace ocho años, comenzamos un viaje como compañeros y, a lo largo de los años, hemos compartido correspondencia que mostraba siempre un respeto y admiración mutuos".