La directora de la Cátedra de Memoria Histórica de la Universidad Complutense de Madrid (UCM), Mirta Núñez Díaz-Balart, no se siente respaldada por la universidad y abandona su cargo. Ha escrito al rector, Carlos Andradas, para comunicarle su renuncia. En declaraciones a Europa Press, dice haberse sentido "poco apoyada" por la universidad en el “largo proceso" sobre la colaboración para la aplicación de la Memoria Histórica en la capital. A su juicio "ha habido mucha tergiversación mediática" y no se ha producido ningún "hecho público" de apoyo por parte de la universidad.

Este aspecto ya lo anunció la Cátedra en su escrito de hace unas semanas cuando renunció a seguir trabajando para el equipo de Manuela Carmena. En el punto cuatro de aquel comunicado en el que acusaba al Ayuntamiento de falta de transparencia y de urgencia en las actuaciones, la Cátedra dejaba clara su decepción: “Ni el diario El País ni los responsables del Ayuntamiento han pedido a este Consejo o a la directora de la cátedra confirmación sobre la lista de 256 nombres hoy anunciada como propuesta de esta cátedra. La directora de la cátedra y otros miembros de este Consejo Ejecutivo han intentado insistentemente, sin éxito, que el rectorado de la Universidad Complutense hiciera públicas las rectificaciones pertinentes reclamadas por la Cátedra”.

Dos semanas más tarde, Mirta Núñez dimite “por el proceso de tergiversación mediática”. Tampoco hace mención a la dimisión que presentó, antes de la suya, José M. Faraldo, historiador y profesor de la Complutense. Mandó una carta a Núñez en la que renunciaba acusando al grupo de sectarismo y de “hacer la peor política de memoria”.

Falardo es autor, entre otras obras y artículos, de La Europa Clandestina(Alianza), ensayo sobre la resistencia armada contra los nazis y los soviets en la II Guerra Mundial. “Soy antifascista desde que recuerdo, pero como investigador sé perfectamente que el consenso antifascista en una sociedad sólo se puede crear, lógicamente, construyendo consenso. Se necesitan políticas que apunten a sumar, no a restar o imponer”.

La profesora de la Facultad de Ciencias de la Información ha señalado sobre el futuro de la Cátedra que cree que "debe seguir adelante" y que se siente "emocionalmente vinculada" a este órgano, pero que ella ya no estará al frente de la misma. Mientras tanto, continuará con su labor en esta materia y este mismo viernes protagoniza un acto en la Casa de la Cultura de Majadahonda donde se debatirá sobre la aplicación de la Ley de Memoria Histórica en la zona noroeste de Madrid.