En noviembre de 2019 el canal Cuatro vivió un importante relevo, un antes y un después en su parrilla que a nadie le fue indiferente. Carme Chaparro (47 años), hasta ese momento la titular al frente de Cuatro al día, se despedía de la audiencia para emprender nuevos retos profesionales. Su adiós coincidía con una remodelación de la parrilla de la cadena en una de sus franjas más delicadas: las tardes. De este modo, aterrizó un nuevo rostro en la cadena hermana de Telecinco, Joaquín Prat, que se puso al frente de Cuatro al día. 

Dicho de otro modo, Cuatro renovaba sus tardes y las masculinizaba -aparte de Prat, llegaba Pablo Chiapella (43) con El Bribón y Risto Mejide (45) con Todo es mentira-. El objetivo claro: destruir ese talón de Aquiles que ha acompañado al canal de un tiempo a esta parte. Hay que decir que a la cadena le costó mucho volver a coger vuelo. De hecho, Joaquín Prat arrancó con un tibio 2 por ciento su nueva temporada. Los datos no eran buenos y hubo semanas de preocupación. Nada parecía hacer remontar el programa de la que sigue siendo mano derecha de Ana Rosa Quintana (64). 

Sin embargo, todo eso parece haber quedado atrás, ya que Cuatro al día ha cogido velocidad de crucero y se encuentra registrando unos datos bastante halagüeños. Tanto es así que en las últimas semanas el espacio no se apea prácticamente ningún día de una media de 800.000 espectadores y ha llegado a superar el 6 por ciento de cuota de pantalla en su primera versión. Y es que, además de Cuatro al día también se repite edición a las 20 horas cada tarde, cosechando unas cuotas de pantalla igualmente buenas, aunque un poco a la baja. 

Sea como fuere, Joaquín ha conseguido hacerse un hueco cada tarde en su programa, algo verdaderamente complicado si tenemos en cuenta que Cuatro al día no solo batalla contra la competencia, sino contra el buque insignia de la cadena de Fuencarral, Sálvame. Y su bien es cierto que en circunstancias normales ambos espacios cuentan con un target diferente y nada tienen que ver en su contenido, en las últimas no ha sido así, ya que ambos han informado del coronavirus. Esto le añade, si cabe, más mérito al espacio de Prat. 

Los otros intentos de Cuatro 

Lo cierto es que las tardes han sido un gran quebradero de cabeza para Cuatro. El canal ha hecho varios intentos, todos fallidos. Dani & Flo, Hazte un Selfi, Singles XD o Mujeres y Hombres y Viceversa, son todos los intentos que se han llevado a cabo para sacar pecho contra Zapeando, el programa que repasa la actualidad televisiva en La Sexta. La última gran apuesta de Mediaset para hacer frente a Frank Blanco cayó sobre Risto Mejide y el lanzamiento de Todo es mentira, espacio que llegaba en enero de 2019 con la intención de desmontar todo tipo de fake news. Este espacio ha pasado por malas épocas, pero poco a poco se ha sabido hacer con un hueco. 

[Más información: Cuatro masculiniza sus nuevas tardes: este es el resultado de la era sin Carme Chaparro]