Calvicie o alopecia. Este síntoma, en cualquiera de sus acepciones, se convierte en uno de los fantasmas más temidos, especialmente en el género masculino, cuando llega la edad adulta. Si la adolescencia se caracteriza por el bullicio hormonal reflejado en acné o vello corporal, el paso de esa etapa vital puede suponer un contraste importante con aspectos como la progresiva pérdida del cabello.

Más allá de una cuestión meramente estética, los médicos no dudan en calificar a la alopecia como una enfermedad con una importante incidencia: afecta a más de un 50 por ciento de la población masculina y a un 30 por ciento de la femenina en algún momento de su vida. En este sentido, conviene aclarar que la rama médica que trata este fenómeno, la dermatología, distingue entre la calvicie androgenética, la más común, de origen hormonal, y la alopecia areata, que consiste en la pérdida del cabello en una determinada zona del cuerpo.

De un modo u otro, y aunque algunos personajes famosos muestren su calvicie con menos complejos que antaño, lo cierto es que cada vez son más las personas que recurren a algún tipo de remedio. Entre ellos, hablamos de un periodista de gran trayectoria en televisión y, por tanto, con un rostro sobradamente conocido: Hilario Pino (57 años).

Cambio radical

Como casi toda enfermedad, la alopecia tiene tratamºiento médico. La forma más tradicional es a través de pastillas (finasterida) o una loción (minoxidil), aunque en los últimos años ha ganado mucho terreno una opción quirúrgica: el microimplante.

Esa fue la fórmula por la que apostó Hilario Pino. El periodista toledano experimentó una pérdida de la densidad capilar bastante relevante, como ha podido comprobarse a lo largo de los años gracias a que ha sido rostro de varios informativos durante su carrera profesional. A principios de la década de los 90, formaba parte de la cadena autonómica madrileña Telemadrid, y hacia el final de década era trabajador de la plantilla de CNN+, dos canales en los que mostró sin complejos su semi-calvicie.

Antes y después de Hilario Pino gracias a los injertos capilares.

La fisonomía del periodista, con sus entradas incipientes primero y su calvicie después, se hizo popular durante los años que trabajó en Telecinco, pero, sin salir de Mediaset, su paso a Cuatro también dejó un cambio importante de imagen. Casi como por arte de magia, Hilario Pino lució un pelo más frondoso, destacando un novedoso flequillo.

La razón de dicho cambio se debe al microinjerto capilar, una técnica quirúrgica que consiste en extraer folículos de zonas codificadas genéticamente para no caerse, como la nuca o los laterales, para después implantarse en áreas como la coronilla o las sienes.

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